Payeses de Lleida arrancan árboles frutales sin recolectar “hartos” de perder dinero

La crisis de precios que arrastra la fruta dulce y en especial la de hueso, ha llevado ya a varios payeses a tomar la drástica decisión de arrancar sus plantaciones sin esperar a recolectar, ya que los ingresos que obtienen son menores al gasto que supone trabajar la tierra, y las pérdidas están alrededor de 10 céntimos por el kilo, según los payeses.

El ingeniero técnico y agricultor Francesc Miarnau aseguró este jueves a SEGRE que estas arrancadas continuarán a lo largo del verano y en otoño porque esta campaña “ha sido la gota que ha colmado el vaso”. Miarnau es payés en Torres de Segre, uno de los municipios en los que la semana pasada se arrancó una plantación de melocotones sin recoger, cuyo dueño prefirió no hablar.

Aseguró que “es normal” porque están “desmoralizados” y considera que cada vez es más complicado vivir del campo. “Antes hacíamos las cosas con ganas, innovábamos en variedades para mejorar pero ahora ya no sé ni cómo dar ánimos a mi hijo para seguir”. Según Miarnau, el adelanto de la cosecha de algunas variedades de pera empeorará más la situación, “porque el mercado de fruta está saturado y con nuevas incorporaciones, aún se ahogará más”.

Para él, la solución pasa por que los payeses se unan y se decidan por dejar de recolectar durante una semana ya que “esas pérdidas serán menores que si continuamos como hasta ahora”, ya que incluso algunos agricultores han tenido que despedir jornaleros “porque llegamos hasta donde llegamos”.

Josep María Companys, representante de fruta de UP en el Segrià, aseguró que en muchos casos el que no arranca se arruina y que “hay mucho nerviosismo en el sector” porque la campaña de fruta de hueso se encuentra en su momento álgido y los precios no remontan. Destacó también que la presencia de hongos en los melocotoneros agrava la situación. Otros municipios leridanos en los que ya se están arrancando plantaciones son Aitona y Menarguens.

La siniestralidad agraria supera en el primer semestre a la de todo 2016 Agroseguro est ima la siniestralidad por los eventos ocurridos durante el primer semestre de 2017 en más de 509 millones de euros, cifra ya superior a la registrada en todo el ejercicio 2016. La previsión para todo el año estaría en torno a los 722 millones de euros, lo que supondría el segundo mayor pago por siniestralidad de la historia del seguro agrario, un 45% mayor que en 2016, que alcanzó los 494,5 millones de euros. Como consecuencia de diversos eventos climáticos, la superficie total siniestrada hasta el 30 de junio alcanza 1,8 millones de hectáreas (de un total de 2,9 millones de hectáreas aseguradas). La siniestralidad supera con claridad las primas abonadas por los agricultores, que suman 416 millones.