La almendra ha perdido un tercio de su valor en origen al recuperar producción California

El precio de la almendra ha vivido unos años de niveles que prácticamente se pueden considerar históricas coincidiendo con un período de muy malas cosechas en California, el estado de EEUU que lidera el mercado mundial. La vuelta a una situación más normalizada en Estados Unidos se ha traducido en caídas de precios que, en el caso de la Llotja de Reus, la de referencia en Catalunya, coloca el producto en sus niveles más bajos desde 2012. De hecho, en el último año, este preciado alimento básico en la dieta mediterránea y con un consumo mundial al alza se ha depreciado prácticamente en un tercio de su valor.

Los últimos datos de la conselleria de Agricultura, que recoge las cotizaciones previstas para el arranque del mes de julio, valoran la variedad Comuna a 4,65 euros el kilo. Hay que remontarse hasta 2012 para buscar registros más bajos, con 4 euros. En el caso de la Marcona, hace seis años bastaban con 4,10 euros para comprar un kilo, según la Llotja de Reus, frente a los 4,90 actuales. Sin embargo, hace apenas doce meses, se valoraba en 7,45 euros. Por último, la Llargueta hoy se vende a 4,75 euros, frente a los 7,10 de hace un año y los 4,05 de 2012. Es decir, los precios en doce meses han bajado más de un 42% en los casos de la Común y la Llargueta, frente al retroceso de casi un 25% en el de la Marcona si se compara con el año 2012. En caso de que la comparación se haga con el año pasado, la Marcona y la Llargueta se han depreciado prácticamente un tercio de su valor (la Comuna no tenía cotización a principios de julio del pasado año en la lonja tarraconense).

Para la próxima campaña, las previsiones apuntan a una producción que en la provincia de Lleida será un 1,6% inferior a la de 2017 que se está comercializando ahora. En concreto, la Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya (FCAC) calcula que bajará de 2.490 a 2.450 toneladas en grano. En las comarcas de Tarragona, el descenso sería más importante, de un 16,4%, y la cosecha se situaría en 1.957 toneladas frente las 2.342 toneladas del año pasado. Así, en el conjunto de la producción catalana, las cooperativas estiman un descenso de la oferta de almendra local de un 8,8 por ciento.

Cientos de hectáreas de nueva producción en los últimos años Los últimos años han estado caracterizados por un interés creciente por la almendra en el mercado internacional. Por ejemplo, se ha incrementado su ingesta en países como la India, una situación que ha coincidido con malas cosechas en California y que explican en buena parte unas cotizaciones disparadas especialmente en los años 2015 a 2017. Estas elevadas cotizaciones han disparado a su vez en los últimos años el interés por el cultivo con la entrada en el sector, por ejemplo, de empresas hasta ahora ajenas al campo, como algunas constructoras y cientos de hectáreas de nueva producción. Pero, además, se han convertido en fincas de regadío superficies que hasta ahora eran de secano. De hecho, el cultivo en regadío ha más que triplicado su superficie en fincas de regadío en la provincia de Lleida desde el año 2007, según se desprende de los datos de Agricultura y ya supera de largo las 3.500 hectáreas.