Los payeses de Lleida invierten para aumentar en casi 4.000 ha el regadío desde el año 2014

El sector agrario de Lleida sigue apostando por la inversión, a pesar de los problemas que presentan algunos sectores en los últimos años por la evolución de los mercado. Así queda patente en el análisis del mapa de superficie de la provincia, elaborado por la conselleria de Agricultura. En concreto, el sector ha incrementado desde el año 2014 la superficie que cuanta con algún tipo de sistema de riego en 3.944 hectáreas. En concreto, se ha pasado de 154.180 a 158.124 hectáreas. En algunos casos, los agricultores insisten en que querrían poder acceder al regadío y están a la espera de grandes infraestructuras para poder acceder al agua que asegure cultivos. Es una demanda, por ejemplo, que reiteran los productores de aceite de oliva de la provincia. Este año, de nuevo, habrá dos situaciones bien diferentes en el sector. Quienes cuentan con riego salvarán la producción, mientras que aquellos que siguen cultivando en secano se verán penalizados un año más por las escasas precipitaciones.

La superficie de fincas en secano retrocede en el período analizado en 2.830 hectáreas. Si en el año 2014 la conselleria tenía contabilizadas 217.204 hectáreas, el año pasado la cifra había bajado a 214.374. Con todo, en la provincia hay 1,35 hectáreas en secano por cada una que cuenta con las aportaciones hídricas aseguradas.

Paralelamente, la superficie forestal registra diferentes comportamientos si tenemos en cuenta los bosques, que crecen en 584 hectáreas, mientras que las zonas de matorrales y matojos se han reducido en 2.543. El departamento incluye el apartado “otra vegetación”, en el que se incluyen los prados, pastos y vegetación de zonas húmedas. De nuevo hablamos de retroceso, en 856 hectáreas. Los ganaderos de producciones extensivas alertan de que la sequía ha arruinado muchos pastos.

El Segrià y Pla, únicas comarcas donde ganan riego El análisis de la superficie en Catalunya sitúa al Segrià, con el sector frutícola a la cabeza, como la única comarca en la que gana con claridad el regadío, De hecho, cuenta con 69.316 hectáreas con el agua asegurada para las producciones, frente 25.238 en régimen de secano. Además el sector continúa la transformación, y desde 2014 las diferentes fórmulas de riego, evidentemente con las de precisión a la cabeza, se han incrementado en 1.355 hectáreas.