La plantilla de Sada exige mantener la actividad y prepara movilizaciones

Los representantes de los trabajadores del matadero Sada de Lleida exigirán a la empresa propietaria de las instalaciones, el grupo holandés SHV, que indemnice a los 239 empleados con 45 días por año trabajado si, finalmente, se acaba ejecutando el ERE de extinción anunciado el lunes por la firma neerlandesa que, a través de Nutreco, adquirió las instalaciones de la desaparecida Copaga hace once años. Así lo manifestó ayer el presidente del comité de empresa, Juan Noguero, que subrayó que la prioridad es mantener los puestos de trabajo. “Lucharemos hasta el final”, aseguró, a la vez que criticó que la compañía les haya amenazado con solicitar la declaración de concurso de acreedores si no hay acuerdo, lo que podría dejar a los trabajadores sin ninguna compensación. En este sentido, Noguero advirtió de que, en función del devenir de las negociaciones, modularán las movilizaciones de protesta. “Apretaremos más o apretaremos menos”, indicó.Por otra parte, denunció que, si se ha llegado a esta situación, ha sido por “una mala gestión de la empresa”. “No sabemos por qué se ha potenciado la planta de València”, admitió, y señaló el próximo martes como la fecha en la que darán inicio las negociaciones con la dirección de Sada.

Por otro lado, Noguero explicó, como avanzó SEGRE, que circulan rumores de que la empresa neerlandesa tiene sobre la mesa una oferta para adquirir las instalaciones de Lleida y que este es el motivo del ERE. Al hilo de esto, se deshizo de una planta de pollos en la localidad valenciana de Rafelbunyol en 2017. También cerró sus instalaciones en La Rinconada, en Sevilla, y clausuró una sala de despiece en la fábrica toledana de Lominchar. Igualmente, presentó un ERE parcial para la planta situada en el barrio de Las Villas de Valladolid. En el caso leridano, fuentes del sector apuntaron ayer a que la pérdida de un contrato con Mercadona podría estar detrás de la decisión de cerrar las puertas del matadero del Polígono Industrial El Segre. A este revés para la firma se sumarían además los bajos precios que se pagan por los pollos.

El comité de empresa atribuye el ERE de extinción a “una mala gestión” de la dirección del matadero

Pueyo admite que el cierre sería “muy negativo” y Crespín califica el anuncio de “golpe muy duro”

En paralelo, fuentes de la conselleria de Trabajo explicaron ayer a SEGRE que Nutreco todavía no ha comunicado oficialmente el expediente a la Generalitat. Mientras, el paer en cap, Miquel Pueyo, se reunió ayer con representantes del comité de empresa y de CCOO y UGT para valorar la situación. “Si finalmente se materializa el cierre, supondría un impacto extremadamente negativo”, reconoció Pueyo, que anunció que hablarán con la empresa y se ofreció para, en última instancia, poder intermediar entre las partes. Por su parte, el subdelegado del Gobierno central en Lleida, José Crespín, calificó el anuncio de “golpe muy duro para el sector agroalimentario”. “Es una mala noticia”, remarcó.