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ECONOMÍA AGROALIMENTACIÓN

Un empresario chino quiere entrar en el sector de la fruta dulce de Lleida

Está en negociaciones de compra de Unfesa y su objetivo es exportar a su país

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Un empresario chino, Lam Chuen Ping, quiere entrar en el sector frutícola de Lleida con el objetivo de exportar producto de calidad a su país y está en negociaciones para la compra de Unfesa. Puede ampliar sus intereses en la agroalimentación local, dado que ya adquirió una finca de 200 hectáreas de Bovera, con 70 plantadas de olivos.

Lleida es una potencia en producción agroalimentaria que ha despertado el interés de Lam Chuen Ping, el presidente de la asociación de empresarios chinos en España. Primero fue el aceite de oliva y ahora quiere ampliar sus negocios a la fruta dulce. El objetivo es contar con producción de calidad para exportar a su país, según explicó ayer a SEGRE. Este emprendedor nacido en el gigante asiático llegó a Barcelona hace 48 años y remarca el potencial de un mercado como el de su país de origen como consumidor de la fruta, al tiempo que reclama mayores facilidades por parte de las autoridades, en especial las españolas, para poder materializar estas exportaciones.

Lam Chuen Ping mantiene en la actualidad negociaciones para adquirir la Unión Frutera Exportadora SA (Unfesa), empresa familiar nacida en el año 1968 y ubicada en Lleida a pie de la carretera de Albesa. La compañía que lideran los Pauls destaca por contar con una capacidad de frigoconservación de 6 millones de kilos, a la que se suma el potencial de manipulación de unos 20 millones, según indicaron fuentes de la compañía.

Moltura las aceitunas en las cooperativas de Bovera y La Granadella y exporta el grueso a China

Lam Chuen Ping visitó ayer las instalaciones y se mostró especialmente interesado y satisfecho al conocer de primera mano la posibilidad de que la fruta pueda ser almacenada en óptimas condiciones hasta un año. Está interesado en fruta tanto de pepita -manzana y pera- como de forma especial en el caso de la de hueso -melocotones, nectarinas, paraguayos o cerezas-. Recuerda, al mismo tiempo, que el chino es un mercado que es capaz de asumir importantes volúmenes de producto e insiste en que la clave del éxito pasa por el equilibrio entre la oferta de la empresa y la demanda que pueda cubrir.

Las negociaciones entre las partes continuarán ahora después de una visita que el emprendedor asiático considero como muy satisfactoria.

Producirá medio millón de kilos de olivas en Bovera Lam Chuen Ping adquirió hace tres años una finca de 200 hectáreas en Bovera, que cuenta en la actualidad con unas 70 plantadas de olivos en sistema superintensivo. La explotación incluye un castillo de comienzos del siglo pasado obra de Jaume Gustà Bondia que quiere convertir en museo y centro de oleoturismo. La finca se encuentra en estos momentos en las labores de la recogida de aceitunas y, a falta de concluir la recolección, se espera alcanzar el medio millón de kilos de olivas. Todo pese a que no se encuentran a pleno rendimiento y que el incendio que asoló este verano poblaciones de Les Garrigues y Segrià quemó algo más de tres hectáreas de la explotación, además de otros daños parciales. La molturación de las aceitunas se produce en molinos de las cooperativas de Bovera y de La Granadella, según explica el empresario, que insiste en que su apuesta es por un producto de excelencia. “No queremos competir por precio, sino por calidad”, remarca Lam Chuen Ping.

El empresario chino Lam Chuen Ping  junto a Francesc y Marian Pauls muestran unas cajas de fruta ante las cámaras de frigoconservación.

El empresario chino Lam Chuen Ping junto a Francesc y Marian Pauls muestran unas cajas de fruta ante las cámaras de frigoconservación.ÍTMAR FABREGAT

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