AGRICULTURA CRISIS
El campo pide reducir el 35% de la factura del gasóleo
Y que los seguros tengan en cuenta el cambio climático || Planas quiere que el consumidor sepa más del origen de los productos
Las organizaciones agrarias pedirán una rebaja del 35% en la factura del gasóleo, que se reduzca el IVA de insumos y que se concedan bonificaciones en la Seguridad Social, entre otras medidas, en las negociaciones con el Gobierno central. Así lo anunciaron ayer en un comunicado conjunto Asaja, COAG y UPA, que también pretenden lograr una exención del 85% en el impuesto especial de electricidad para los sectores ganaderos. Todo ello a fin de diseñar un “plan de choque urgente” que aborde la crisis de rentabilidad en la que están sumidas las explotaciones agrarias. Y es que confirmó ayer mismo el ministro de Agricultura, Luis Planas, las mesas interministeriales de negociación con el sector agrario se reunirán la semana que viene. Por ahora, solamente tiene fecha la de seguros agrarios, que será el miércoles. A este respecto, los representantes del campo pondrán sobre la mesa la necesidad de que los seguros contemplen los percances extraordinarios derivados del cambio climático en unas condiciones de precios razonables para los productores.
Otra de las reivindicaciones que avanzaron ayer Asaja, COAG y UPA es que plantearán a Planas que los parados mayores de 52 años de Andalucía y Extremadura puedan compatibilizar el cobro del subsidio con un trabajo sin sufrir penalizaciones.
Mientras tanto, el ministro Planas puso el foco en que Europa aumente los requisitos de información sobre el origen de los productos.
Bonificaciones para atenuar el impacto en los costes del SMI Los productores y exportadores de frutas y hortalizas agrupados en Fepex plantearon el martes la necesidad de que se aprueben “modificaciones y otras medidas” para atenuar el impacto en los costes del incremento del salario mínimo interprofesional (SMI). Y es que, reunidos en la comisión de gobierno de Fepex, constataron que, el alza del sueldo mínimo ha comportado un “fuerte incremento de los costes de producción” y “hay previsiones de nuevos incrementos”. En este sentido, hace cinco años, el SMI era de 655,20 euros, y en la actualidad ha subido a 950 euros.