La frutícola Baró se suma a la OPFH de Casa Ametller, que entra en el sector en Lleida

La empresa frutícola Baró e Hijos, de Albatàrrec, se ha sumado a la organización de productores que impulsa Ametller Origen, la rama agrícola del Grupo Casa Ametller, que entra de esta manera en Lleida. En concreto, aporta más de 500 hectáreas de producción propia, principalmente de fruta de hueso, como melocotones y nectarinas, aunque también cuenta con manzanas y peras, especies de pepita. Desde la firma leridana, Montse Baró explica que esta empresa familiar nacida en 1960 ha estado siempre volcada en la exportación, con Alemania, Reino Unido y Europa centra como sus principales mercados. La compañía ha apostado por Ametller como compañero para crecer. “Nosotros somos especialistas en mercados exteriores y ellos lo son en el proximidad y ambos tratamos de dar valor a la fruta de hueso”, explica.

Jordi Ametller, director general Agrícola del Grup Ametller Origen, remarca en esta línea que se presentan como “una buena conjunción” y destaca la complementareidad de los diferentes negocios. Como ejemplo, apunta que la oferta de calibres grandes puede representar un problema en ciertos mercados internacionales, mientras que en el interior suele ser al revés, y es la fruta con tamaño más reducido la que topa con más problemas de comercialización. Ametller es portavoz de la OPFH, que con los diferentes miembros rozará a finales de año más 2.000 hectáreas de diferentes cultivos repartidos por todo el Estado, desde tomate de invernadero a cítricos, pasando por fruta dulce, entre otros, desde Lleida a Murcia, pasando por el Delta de l’Ebre. Con esta oferta, se trata de poder aprovechar mejor las necesidades de compradores europeos, que quieren surtido de diferentes tipos de productos todo el año. Explica el proyecto como una organización de productores que pueda ser espejo para otros.

A la hora de valorar la integración de Baró en la OPFH remarca que puede envasar en sus instalaciones cualquier tipo de fruta para satisfaces las exigencias de cualquier país europeo y que, además, diversificar mercados al máximo.

El 25% de la cosecha irá a las tiendas y el resto, a otros mercados La OPFH de la que forman parte Ametller Origen y Baró e Hijos junto con otros socios no quiere ser “endogámica” y por ello está previsto que solo una cuarta parte de su producción pueda tener las más de cien tiendas de Casa Ametller. El resto de la producción irá a otros mercados, según explica Jordi Ametller. Alerta que no es bueno para la salud de una compañía que un cliente pese más de un 25 o 30% en su cartera de clientes y el objetivo es que la organización de productores crezca en línea con el incremento de sus clientes.