La conselleria de Agricultura apuesta por acelerar la transformación del sector catalán
Cuenta con diez proyectos de más de 3.000 millones para culminar en diez años
“El país ha de decidir de cara a los próximos años qué quiere comer, cómo producirlo y cómo desea que viva la gente en el conjunto del territorio”. Con esta frase, la consellera de Agricultura, Teresa Jordà, quiso dejar claro la importancia que tienen no solo para el campo, sino para el conjunto de la ciudadanía catalana los proyectos que ha elaborado su departamento para transformar el sector agroalimentario. Hablamos de un programa a diez años vista y con 3.000 millones de euros que se ejecutarán desde el departamento de Jordà sobre un paquete global de 3.900 en políticas agroalimentarias.
Así lo explicó en la webinar que el Grup SEGRE y la conselleria de Agricultura organizaron ayer para profundizar en objetivos tan importantes como el refuerzo del bienestar y la capacidad productiva, pero apostando al mismo tiempo por la sostenibilidad. Jordà destacó que no hay tiempo que perder y que los fondos europeos para la reconstrucción tras la pandemia representan una oportunidad y “nos permitirán poner la sexta”. De hecho, calcula que más de 2.000 millones se podrán invertir en un plazo de cinco años. “La reactivación a medio y largo plazo ha de llegar de la mano de la transformación”,destacó la consellera a la hora de presentar los diez proyectos ideados para hacer frente a muchos retos como los ambientales, económicos y sociales a los que se enfrenta el sector agroalimentario catalán. Los diez proyectos transformadores dan respuesta a las demandas de la sociedad para garantizarlo que buscamos, la calidad de vida de nuestros ciudadanos. Destacó que hace tiempo que estaban trabajando en estos objetivos, pero los fondos que llegarán de Europa, dijo, nos permitirán dar un salto hacia adelante.
Los proyectos apuestan por potenciar el asesoramiento, la transferencia de conocimiento y la innovación. También por crear cadenas de valor en el territorio a partir de la producción y los biomateriales, bioproductos y biocombustibles, por crear condiciones para favorecer la calidad de vida para generar y preservar los servicios ecosistémicos y la calidad de vida y la cohesión territorial. Asimismo apuesta por facilitar la disponibilidad del producto de proximidad al consumidor y mejorar la remuneración al payés, porque “la sostenibilidad comienza porque el productor se pueda ganar la vida”. La consellera remarcó la importancia de lo que calificó de clásico, en referencia a que hay que acelerar la modernización de los regadíos para hacer un uso más eficiente del agua, promover la transformación de los modelos productivos tradicionales hacia modelos más sostenibles, potenciar la investigación y el desarrollo rural, impulsar la transformación digital del sector y el abastecimiento de energías renovables del sector.
«Con la agenda transformadora podemos dar un salto sideral»
Jaume Sió. Conselleria de Agricultura
El subdirector general de Transferencia e Innovación Agroalimentaria de la conselleria de Agricultura, Jaume Sió, afirmó que “con la agenda transformadora podemos dar un salto sideral”. Con esta rotunda afirmación quería dar idea de la importancia de “la gran oportunidad que tiene el sector agrario, dijo, de liderar la transformación económica del país, que se haga desde el mundo rural”. En este punto destacó la importancia de aprovechar las oportunidades y no dejar a nadie atrás. Por ejemplo, citó que la digitalización representa una oportunidad y un reto, pero puede convertirse en una amenaza si no se hacen las cosas bien. Aludió al riesgo de perder activos por el camino algo que, insistió, “no nos podemos permitir perder a ningún payés”. Quiso hacer una referencia explícita a las mujeres, que han pasado en los últimos tres años de representar un 20% en los ciclos formativos agrarios a llegar a un 25%. Un avance que se debe intensificar. La consellera Jordà poco antes se había felicitado del incremento de un 20% de las matrículas en las Escoles Agràries, lo que demuestra el interés en el sector.
«Deberíamos progresar en nuestra autosuficiencia alimentaria»
Francesc Reguant. Colegio de Economistas
El director del Observatorio de Economía Agroalimentaria del Colegio de Economistas de Catalunya, Francesc Reguant, considera que los diez planes presentados por la conselleria están “bien enfocados y hacían falta”. Pero quiso aportar también aspectos que considera importantes y en esta línea dijo que “se debería añadir el objetivo de progresar en nuestra autosuficiencia alimentaria”. En este contexto aboga por desterrar las falsas imágenes que se tiene en muchas ocasiones de la agricultura, que tildó de bucólicas. Por ello, considera que hay que defender el suelo de uso agrario y llamó la atención sobre el hecho de que la alimentación debe ser la primera prioridad. Reguant es especialmente crítico con el establecimiento de las zepas en el área regable del canal Segarra-Garrigues. Dijo que “ningún país en el mundo lanza 1.600 millones de euros para proteger unos pájaros que no existen o si lo hacen como mínimo pueden hacerlo en las tierras contiguas, y no se va a buscar las más productivas” como zonas de especial protección para las aves (zepa).
«Hace falta asesoramiento a los pequeños payeses»
Dolors Català. Presidenta Mujeres del Mundo Rural
La presidenta de la Asociación de Mujeres del Mundo Rural, Dolors Català, llamó la atención de que la mayoría de las explotaciones catalanas son pequeñas,respetuosas con el medio y arraigadas en el territorio y que por ello harán todo lo que esté a su alcance para conservarlo. Consideró importantes los diez proyectos de la conselleria para transformar el sector en aspectos como los circuitos cortos de comercialización y defendió que “nos haría falta más asesoramiento a los pequeños productores”. Se sumó al llamamiento de Francesc Reguant a caminar hacia la autosuficiencia alimentaria y quiso dejar claro que el campo es productivo y no un jardín, en referencia a la imagen equivocada que en demasiadas ocasiones se tiene del mundo rural desde las grandes urbes.