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INVESTIGACIÓN UDL

La UdL prueba en el Penedès diferentes cubiertas vegetales para conservar el suelo en viñas ecológicas de la Familia Torres

Con el objetivo de reducir las emisiones de CO2 y facilitar la conservación del suelo.

La UdL prueba en el Penedès diferentes cubiertas vegetales para conservar el suelo en viñas ecológicas de la Familia Torres

La UdL prueba en el Penedès diferentes cubiertas vegetales para conservar el suelo en viñas ecológicas de la Familia TorresACN

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Investigadores del grupo de Malherbologia y Ecologia Vegetal de la Universidad de Lleida (UdL) estudian diferentes cubiertas vegetales para conservar el suelo en viñas ecológicas. El objetivo de la investigación que se está haciendo en el Penedès, en las viñas Jean Leon propiedad de Familia Torres, es reducir las intervenciones mecánicas de pases de cultivador y de intervid (equipo para remover el suelo bajo las filas de las vides) para el control de las malas hierbas y reducir las emisiones de CO2 y facilitar la conservación del suelo. El estudio se enmarca en el proyecto I+D+i Coppereplace de alternativas al uso del cobre en viticultura liderado por la Plataforma Tecnológica del Vino y con financiación del Programa Interreg Sudoe de la Unión Europea.

El estudio lleva por nombre Mantenimiento del suelo en viñas ecológicas mediante el establecimiento de cubiertas vegetales y mulchings. Los investigadores de la UdL han sembrado, en una superficie de media hectárea, diferentes cubiertas vegetales a base de gramíneas (cebada y ryegrass) en las calles de las viñas, y bajo las filas de la viña, dos tipos de almohadillados diferentes: leguminosas (un tipo de trébol y lote corniculado) y corteza de pino.Los ensayos del grupo de Malherbologia y Ecologia Vegetal pretenden encontrar métodos de mantenimiento del suelo en viña ecológica alternativos en los pases de intervid o de cultivador, explica el investigador de la UdL, Jordi Recasens. "Con el establecimiento de las cubiertas vegetales se persigue que puedan ejercer presión sobre las malas hierbas, sean capaces de autosembrarse y ayuden a mantener la estructura del suelo para evitar, así, su compactación", señala."El almohadillado de corteza y restos de pino se entronca, como subproducto forestal, con la economía circular, la cual se basa en la sostenibilidad y el reaprovechamiento," indica Recasens. Al mismo tiempo pretende crear un escenario que evite la emergencia de malas hierbas y ayude a mantener la humedad y estructura del suelo bajo las vides", añade.

Los trabajos empezaron al inicio de la campaña 2021 y se prolongarán una campaña más para poder valorar la eficacia de las cubiertas y de los almohadillados, no sólo en la reducción de la proliferación de malas hierbas, sino también en el mantenimiento de la calidad del suelo.

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