AGRICULTURA FRUTA
Arranca la cosecha de pera Limonera con menos fruta pero más calidad
A falta de previsiones oficiales para Lleida, se augura un ligero descenso de la producción || Las heladas de primavera afectaron las principales zonas productoras
Las altas temperaturas han beneficiado en los calibres y los azúcares de la pera Limonera.
Los productores de pera Limonera arrancan esta semana la campaña de recogida con una semana de retraso con respecto al año pasado y con unas perspectivas de menor producción por las heladas de la pasada primavera.
Con todo, las altas temperaturas de estos días han favorecido el mayor tamaño de la fruta y a que los azúcares sean los óptimos, según explicó ayer el presidente de Asaja Lleida, Pere Roqué.
La producción de pera Limonera se exporta, en su mayor parte, a países como Francia o Alemania
Como ya adelantó Afrucat en las previsiones generales de cosecha de pera y manzana a finales del mes pasado, se prevé una reducción en torno al 5% de pera en el conjunto del Estado, debido principalmente a que las
heladas de la pasada primavera afectaron básicamente peras de variedades más tempranas como la Limonera o la Ercollini, mientras que la afectación en variedades de finales de verano como son la Conference o la Blanquilla varían mucho dependiendo de la zona.
Aunque habrá que esperar a las previsiones oficiales de producción de pera de esta campaña, en Lleida, principal zona productora de España de pera, esta también se verá mermada en volumen ya que las heladas de primavera afectaron las comarcas del Segrià, Noguera, Pla d’Urgell y Urgell, donde se concentra mayoritariamente la producción de esta fruta en la provincia.
La Limonera es una pera cuya producción, tradicionalmente, se dirige a la exportación, a países como Francia o Alemania, donde es muy apreciada, aunque también tiene buena acogida en el mercado estatal. Paulatinamente ha ido perdiendo empuje en otros mercados y también se ha reducido el número de hectáreas destinadas a su producción. Esto se ha debido en parte por una reconversión varietal hacia otras peras, con especial empuje de la Conferencia. Pero también por el cambio de apuesta frutícola hacia la fruta de hueso.
En cuanto al ritmo de trabajo de este inicio de campaña, marcado por la pandemia de la Covid-19 y las altas temperaturas, el presidente de Asaja Lleida remarcó que que la normalidad es la tónica general y explicó que el inicio de la cosecha de pera está encadenándose perfectamente con la de la fruta de hueso, asegurando los 25.000 puestos de trabajo necesarios para llevar normalmente la propia campaña de la fruta en la provincia “por muy mal que le pese a algunas organizaciones y sindicatos que lo unico que hacen es entorpecer su recorrido”.
