LLEIDA
Luis Planas: «Debemos pactar la PAC a tiempo para no perder ayudas»
El ministro de Agricultura, Luis Planas, analiza en esta entrevista concedida a SEGRE con motivo de la Fira de Sant Miquel algunos de los temas claves de la situación del sector en estos momentos, en especial sobre la marcha de las negociaciones para aplicar la reforma de la Política Agraria Común. Recuerda que el plan estratégico, que negocia con las comunidades, debe estar en Bruselas a final de año para que dé su visto bueno “si no queremos poner en riesgo la percepción de las ayudas” por parte de los payeses
¿En qué situación se encuentra la negociación sobre la Política Agraria Común?
Estamos en la recta final de la elaboración del Plan Estratégico para la aplicación de la reforma de la PAC en España, que debemos enviar a la Comisión Europea antes del 31 de diciembre para su aprobación.
Desde la Conferencia Sectorial del 14 de julio, en la que acordamos con las comunidades seguir avanzando en el documento propuesto por el ministerio, hemos mantenido un intenso calendario de trabajo, con reuniones técnicas para diseñar los ecoesquemas, que son la principal novedad de la nueva PAC y representan el 23% del presupuesto, y para abordar monográficamente la renta básica, las ayudas asociadas y las medidas de desarrollo rural. En octubre convocaré a los consejeros de Agricultura a una nueva Sectorial.
En España conviven modelos agronómicos muy distintos, pero no podemos hacer 17 planes, hay uno solo para el conjunto de España.Se trata de dar cabida a todos, que cada uno de los diferentes modelos productivos esté recogido, y no se pueden satisfacer al 100% las propuestas de cada comunidad. El calendario es inexcusable si no queremos poner en riesgo la percepción de las ayudas por parte de nuestros agricultores y ganaderos.
¿Cuáles son las claves que defienden en la PAC?
Que sea más justa y más social, equitativa en el reparto de las ayudas, y que beneficie sobre todo a quien más apoyo necesita, las pequeñas y medianas explotaciones familiares profesionales, que son la auténtica clase media que soporta la agricultura y la ganadería en España.
Hemos garantizado que el 60% del presupuesto será para ayudas a renta básica, hemos reducido el número de regiones para propiciar la convergencia y limar las diferencias en los derechos de pago, hemos introducido un tope máximo para las ayudas de 100.000 euros (capping) y la degresividad para reducir progresivamente las cuantías de las ayudas a partir de 60.000 euros. Los ecoesquemas, que son los elementos que más incertidumbre han generado, son prácticas voluntarias que contribuirán a preservar el medio ambiente, la biodiversidad y a luchar contra el cambio climático. No hay que verlos como exigencias, sino como inversiones medioambientales que además exige la sociedad.
¿Cuál es la previsión para el mercado de cereales, hoy al alza, y su repercusión en la ganadería?
Los cereales y otras materias primas utilizadas en la alimentación de los animales han visto incrementados sus precios de forma significativa desde el último trimestre de 2020. En las últimas semanas se ha producido una estabilización, con ligeras alzas o descensos. Sin embargo, es difícil hacer una previsión de cómo evolucionarán los precios, puesto que depende de múltiples factores, muchos de ellos de carácter internacional. Somos conscientes de las repercusiones en el sector ganadero, puesto que la alimentación animal significa el mayor coste de la producción, y por este motivo realizamos el seguimiento continuo de los mercados.
Según nuestras estimaciones, los precios medios de los piensos en lo que llevamos de año han alcanzado los valores más elevados desde 2015, con las consecuencias que esto tiene para los sectores ganaderos, ya que dificulta cubrir los costes de producción. No obstante, el ministerio tiene entre sus objetivos impulsar un plan de proteína vegetal, con el fin de reducir el elevado déficit que tenemos, tanto para alimentación humana como animal. Todo va en línea con el plan de proteína vegetal de la UE, y las nuevas estrategias comunitarias como el Pacto Verde, y la ‘de la granja a la mesa’, cuya finalidad es lograr un sistema agroalimentario más sostenible, entre otras medidas, mediante la diversificación de las fuentes de proteínas..
¿Cómo valora la campaña de la fruta de verano?
En Europa ha sido la de menor producción en 10 años. A pesar de ello, la conclusión es positiva, ya que el comportamiento de los precios ha sido bueno para los productores. En Catalunya la producción se sitúa, según las previsiones a mes de junio, un 10% menos que en 2020 y un 29% por debajo de la media de los últimos 5 años. Las ventas al exterior se han revalorizado, ya que a pesar de que se ha exportado un menor volumen, los ingresos han mejorado y, esta revalorización en el mercado exterior, ha tenido su reflejo en los precios nacionales, con valores por encima del 30% de la media de los últimos cinco años en el mercado leridano para melocotón, nectarina y paraguayo.
Teniendo en cuenta la evolución de la demanda china, ¿cuáles considera que deben ser las estrategias de futuro del sector porcino?
A la espera de ver cómo evoluciona el mercado chino, el sector porcino español tiene que continuar con su apuesta por la diversificación de los destinos comerciales y por la apertura de otros nuevos en el escenario mundial, con el apoyo decidido del ministerio. Por otra parte, el crecimiento del sector debe ser sostenible, mejorando el respeto al medio ambiente y la sanidad y bienestar de los animales, en línea con las demandas de la sociedad, y con las futuras políticas y directrices comunitarias. Ello debería contribuir además a mejorar la imagen y la competitividad del sector en el mercado mundial.
Ante una crisis láctea, entre otros sectores con problemas de cotizaciones especialmente bajas, ¿cómo respondería a las críticas a la ley de la cadena alimentaria?
En anteriores momentos de tensiones en la cadena láctea no existían las herramientas adicionales que ha introducido la reforma de la Ley de la Cadena. El sector cuenta ahora con una cobertura legal adicional que le permite estar más protegido, porque se impide vender a un precio inferior a los costes de producción. La destrucción de valor pasa a ser una práctica prohibida y tipificada como infracción grave.