Los productores de maíz logran los mejores precios de la última década

La campaña de recolección del maíz que comenzó a finales del mes pasado en Lleida se prevé “bastante buena” para la mejora de la producción y por el incremento de los precios por encima de los 255 euros por tonelada, cifras que no se veían desde hacía casi una década.

El miembro de la Comisión Permanente de Unió de Pagesos (UP) y presidente de la Cooperativa de Linyola (Pla d’Urgell), Jaume Pedrós, cree que este año “acompaña todo: kilos y precio”, pese a que el aumento del precio es un “handicap” ya que los costes de producción también han subido.

Así, se han registrado medias de entre 12 y 14 toneladas de maíz por hectárea en el maíz de primera cosecha, mientras en los de segunda la previsión se sitúa entre las 10 y las 11 toneladas.La campaña de recolección del maíz en Lleida ha comenzado como es habitual a finales de septiembre y se alargará hasta mediados de noviembre, cuando se terminarán de recoger los maíces de segunda cosecha, es decir, aquellos que se encuentran en fincas que durante el año ya han acogido la producción de otro cereal, como la cebada.La producción de esta campaña se prevé ligeramente mejor que el año pasado porque no ha habido araña roja, un insecto que hace que la planta se seque antes de tiempo, y porque la climatología ha acompañado durante todo el proceso de crecimiento del cultivo. Así, Pedrós detalló que las lluvias que cayeron durante las semanas de siembra fueron beneficiosas para el cultivo, así como también lo fueron la ausencia de picos pronunciados de calor en verano y las temperaturas frescas pero a la vez secas de este otoño.

Por otro lado, indicó que el próximo año habrá que ver cómo afectará la plaga de escarabajo Diabrotica virgifera, un insecto que este año se ha detectado por primera vez en Catalunya, en plantaciones de maíz del Pla d’Urgell.La campaña de este año viene marcada por un aumento destacado de los precios de venta en origen que pasan de los 190 euros por tonelada en 2020, hasta situarse entre los 255 y los 260, unas de las cifras más elevadas que se registran los últimos años, como ya publicó SEGRE.

“Cada vez que hay una crisis a nivel mundial el precio de las materias primas sube”, señaló Pedrós, aunque vienen acompañados de un aumento del precio de los costes de producción, tales como los abonos y del combustible. .