Comprar manzana de otros países cuesta casi el doble que la de Lleida

Comprar manzanas producidas fuera de España tiene un precio superior a consumir las producidas en el Estado, un sector liderado por Lleida, según afirmaron ayer las patronales frutícolas catalana (Afrucat) y estatal (Fepex). Ponen de ejemplo las manzanas Golden y apuntan que las importadas cuestan aproximadamente 3 euros el kilo, mientras que las locales se sitúan en torno a los 1,5 euros. En el resto de las variedades sucede lo mismo, según afirman.

Las Gala o las Fuji también tienen una diferencia de precio significativa, 2€/kg frente a 1,5€/kg y 2,5€/kg frente a los 2€/kg, respectivamente. Así lo explicó ayer Joan Serentill, presidente de los comités de pera y manzana de Fepex, Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas, y de Afrucat. Defendió que “es posible cambiar esta situación y fomentar nuevos hábitos de consumo centrados en el producto local.

Hoy en día, en España producimos 500.000 toneladas de manzana, por lo que el consumidor tiene la posibilidad de priorizar el consumo local de esta fruta en lugar de la importación”. Al mismo tiempo, añadió que “en los próximos años este paradigma va a cambiar, gracias a la apuesta de los productores locales en incrementar el número de plantaciones y calidades con las variedades más nuevas del mercado. Un esfuerzo importante que, con el apoyo del consumidor y su preferencia por lo local, permitiría luchar contra la despoblación de las zonas rurales, dando oportunidades a nuestros jóvenes y asegurando el relevo en el campo”.Afrucat y Fepex explicaron que España importa más de 200.000 toneladas de manzana anuales, que representa el 40% del consumo, procedentes de Francia, Italia, Portugal o Polonia.

Para poder traerlas, se necesitan unos 10.000 camiones que generan unas emisiones de 10 millones de kilos de CO2. Según los datos de Afrucat, la producción y consumo de manzanas españolas emite casi la misma cifra de gases de efecto invernadero que los que captan los mismos árboles, por lo que la huella de carbono es prácticamente nula. El director de Afrucat, Manel Simon, dijo que “hay por delante una oportunidad única de cambiar los hábitos y priorizar lo local”.

La mitad de la población se inclina por lo local

Casi la mitad de la población española está dispuesta a comprar productos locales. Un dato que se refleja en el informe sobre las tendencias de los consumidores post-covid en materia de sostenibilidad ambiental y ética realizada por la multinacional de servicios profesionales Ernst & Young. Consumir productos locales favorece disminuir el impacto ambiental contribuye a mejorar la situación social y económica de entornono solamente a , sino que también nuestro, según apuntó ayer Afrucatgenerando empleo de calidad y cuidando y preservando nuestro territorio.