Payeses y centrales de Lleida piden menos temporeros por las graves heladas

Los agricultores y las centrales frutícolas de Lleida se han tenido que enfrentar en años anteriores a la falta de mano de obra para recoger y envasar el producto, pero este año la situación es la contraria. Están advirtiendo que no vengan temporeros porque no será prácticamente necesaria mano de obra ante los efectos devastadores de las pasadas heladas con zonas en las que las pérdidas llegan al 100% de la producción. La situación ha llegado a que si en otros años se hablaba de “efecto llamada” pidiendo trabajadores, ahora la situación es el “efecto no llamada”.

El alcalde de Lleida, Miquel Pueyo, dijo que ante la previsión una menor demanda de trabajadores en esta campaña, espera que no haya una afluencia temporeros sin papeles como años anteriores porque, según él, son los ayuntamientos los que tendrán que asumir su asistencia social o bien convencerlos de que marchen porque no hay suficiente trabajo.

La situación es tal, que agricultores y empresas barajan la presentación de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) no solo de trabajadores fijos discontinuos sino incluso de empleados de plantilla durante todo el año, con hasta unos 40.000 empleos desde fijos a temporeros.

En el caso de los fijos discontinuos, aquellos que llegan cada verano a trabajar durante unos meses de forma estable, los contratos suelen establecer una “ventana” de actividad. Teniendo en cuenta que cada campaña es diferente, se prevé un período en el que podrían ser necesarios para la campaña, pero con flexibilidad en función de la producción y del período de maduración de la fruta.

Fuentes de Afrucat explicaron que las empresas ya están recibiendo llamadas de trabajadores preguntando cuándo comenzarán a trabajar. Se trata tanto de personas que viven en el propio territorio, en otras partes del Estado o incluso en sus países de origen.Fuentes de los agricultores advierten que este año no solo serán necesarios menos trabajadores, sino también durante menos días. Por ello, insisten en la necesidad de poder contar con herramientas para dar respuesta a los trabajadores que se puedan ver afectados por la caída de la producción como los ERTE.

De momento, el sector ya cuenta con el compromiso de la Generalitat de que aceptarán expedientes dentro de la modalidad de causa mayor y que prevén una tramitación rápida de los mismos, en plazos estimados de cinco días.