AGRICULTURA ANÁLISIS
La campaña de forrajes acaba con una caída de la producción del 7% y mirando los costes
El encarecimiento de fletes, que se suman a otros como la energía, preocupación del sector || Confía en que la exportación se mantenga firme en la próxima, continuando la tendencia de los últimos meses
El subdelegado del Gobierno ha visitado Venso, cuya administradora preside la Aefa, Cristina Vendrell.
La producción de forrajes deshidratados ha acabado la campaña el 31 de marzo con 1.450.523 toneladas en España, liderada por Lleida y el conjunto del Valle del Ebro. Representa un descenso del 1% con relación a la anterior, cuando se produjeron algo más de 1.465.000 toneladas. En el caso de Catalunya, la reducción ha llegado al 7%, mientras que en Aragón se ha mantenido estable.
La alfalfa en líneas generales ha tenido un buen rendimiento en el campo y la producción en calidad es “bastante positiva”, según la Asociación Española de Fabricantes de Alfalfa Deshidratada (Aefa). Desde el punto de vista de las ventas de forrajes deshidratados, la campaña 2021/22 comenzó lenta y con bastantes dudas, centradas especialmente en los fletes marítimos y con un mercado estatal en horas bajas. Con el paso de los meses, la situación ha ido variando y la demanda se ha incrementado notablemente, especialmente en los mercados internacionales, con cifras de exportación “bastante buenas”.El sector inicia una nueva campaña con bastante incertidumbre, derivada especialmente del brutal encarecimiento de los costes de transformación que van a sufrir las industrias.
Confía en que el mercado continúe demandando productos deshidratados al ritmo que lo ha hecho en el último semestre de la campaña, especialmente el mercado internacional, del que dependen cerca del 80% de las ventas. El subdelegado del Gobierno en Lleida, José Crespín, ha visitado esta semana Venso, cuya administradora, Cristina Vendrell, es la nueva presidenta de Aefa. La firma prevé alcanzar una producción de 140.000 toneladas en sus plantas.
