Expositores y visitantes proponen “reinventar” el formato de la Fira

La impresión tanto de una parte de los expositores de esta 68ª Fira de Sant Miquel como la de parte de los asistentes a la misma, sobre todo de payeses, es que, según su opinión, “el formato de esta cita anual de exposición de maquinaria agrícola se ha diversificado tanto que ha perdido su esencia profesional y se está convirtiendo poco a poco en un mercadillo”. Así lo expresó ayer a SEGRE un vendedor de trituradoras agrícolas de Monzón con más de 30 años de asistencia a esta cita. “No es que sea solo problema de esta feria en particular sino de todas.

Por ejemplo, también asistimos a la feria internacional de París y se está convirtiendo en un gran mercadillo en la que se pone a la venta todo tipo de cosas, desde comida hasta sofás”. Esta también es la impresión de unos vendedores de Juneda de maquinaria que, aunque ven que la asistencia de público se ha estabilizado con respecto a otros años, durante la feria no se finalizan tantos contratos como antes. “La gente ya viene informada desde casa a través de Internet y viene aquí a curiosear y terminar de decidirse si les interesa ciertos productos”, explican los vendedores.Por parte del público, la opinión es muy parecida.

Así, un agricultor de Reus y asiduo tanto a esta feria como a la de Mollerussa, aseguró que suele venir regularmente a ver si hay alguna innovación. Sin embargo nota que la afluencia de público profesional ha bajado bastante y ha aumentado más la de las familias.Por su parte, un payés de Tortosa, asegura que ha venido a la feria para interesarse sobre las novedades e innovaciones de las nuevas maquinas que le interesan para su trabajo. “Aunque ya tienes hecha en tu cabeza una idea de lo que buscas, está bien acudir a estas citas para verlas in situ”, aunque cree también que cada vez este tipo de ferias son menos profesionales y son más generales.