AGRICULTURA CRISIS
Las cooperativas están “contra las cuerdas” por los costes energéticos
La FCAC calcula que los consumos se pueden triplicar hasta los 79 millones este año || Avisa de que el encarecimiento repercutirá en la cesta de la compra
La Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya (FCAC) alertó ayer que las cooperativas agrarias podrían ver triplicar sus costes energéticos, pasando de los 27 millones de euros de 2021 a los 78,6 millones de este año. De este incremento, el 71 por ciento corresponde al encarecimiento de la luz y el 29 por ciento restante al gas natural.El presidente de la federación, Ramon Sarroca, avisó que este incremento puede poner “contra las cuerdas” al sector productor y pide “soluciones estructurales” ante la magnitud de la crisis.“Las reducciones fiscales adoptadas son positivas, pero no suficientes. Si no se adoptan medidas extraordinarias, inevitablemente los precios de los alimentos continuarán subiendo en cumplimiento de la ley de la cadena alimentaria y se repercutirán en la inflación y la cesta de la compra”, apuntó Sarroca.Por sectores productivos, quienes más sufrirán el incremento son las cooperativas de elaboración de piensos para ganado, con 24 millones de euros (47% del total).
Sin embargo, los sectores del arroz, el maíz y los forrajes tendrán que soportar un aumento de 7,3 millones (14% del total) y el de la leche de unos 7,3 millones (14%). Otros ámbitos como la fruta, la huerta y la planta viva también pueden ver incrementar sus costes. En otros sectores productivos como el aceite de oliva, la FCAC estima que el incremento se pondrá de manifiesto próximamente porque los molinos tienen la actividad muy concentrada en una época del año que, en su mayoría, se iniciará en breve.Según la federación catalana, algunas industrias cooperativas de distintos sectores ya han tenido que detener su actividad y la han derivado a otros centros de transformación para optimizar costes.
Sin embargo, otras cooperativas están valorando o han realizado recientemente la sustitución del uso de combustibles de origen fósil hacia biomasa, pero la transición no siempre es posible o es muy costoso implementarla a corto plazo.Las organizaciones agrarias leridanas ya alertaron desde el principio de la invasión rusa de Ucrania, a finales del mes de febrero, que el incremento ininterrumpido de los precios de la energía está no solo minando los costes de producción de agricultores y ganaderos leridanos, sino que además están al borde de la imposibilidad de hacer su trabajo.