AGROALIMENTACIÓN ANÁLISIS
Heladas y sequía hunden un 70% la cosecha de miel, con costes disparados
Las heladas y la sequía han diezmado la producción de la fruta dulce, la almendra y el aceite, y con ella también la de miel, que depende de que haya buenas floraciones. Pero, además, es víctima de los predadores, desde el abejaruco a la avispa asiática. Una “tormenta perfecta” que ha hundido la producción este año un 70%, según alerta el sector.
“El cambio climático, el incremento desmesurado de los costes de las materias primas, el abejaruco y la avispa asiática están machacando al sector de la apicultura”. Así de rotundo se expresó ayer en Lleida desde Unió de Pagesos Josep Maria Claria. Afirmó que la producción ha caído un 70%, haciendo de esta una campaña desastrosa por diversas razones. Primero por las heladas de abril, que arrasaron con la producción de fruta dulce y almendra especialmente, además de dañar los olivos y otros cultivos.
Sin flores, las abejas carecen de sus alimentos naturales, el polen y el néctar. Pero después llegaron las continuas olas de calor y la sequía. Por si fuera poco, los panales se han visto afectados por problemas de ácaros y, además, las abejas se enfrentan a dos grandes predadores.
Por una parte se encuentra el abejaruco, una especie de pájaro protegida, y otra, por la avispa asiática. El propietario de Mel Sant Guim, Eloi Biosca, afirma que ha recolectado “el 50% de la producción de primavera y el 25% en la producción del resto del año como ya pasó en 2012”. Alerta que no es un fenómeno aislado sino que los próximos años apuntan en la misma línea como consecuencia del cambio climático.
La sequía y las altas temperaturas provocan floraciones fuera de tiempo “las abejas van locas”. Entonces, llega una helada y corta de raíz todo el ciclo, lamenta. Un panorama difícil para la subsistencia de los apicultores que, además deben afrontar que juegan en desventaja en la comercialización, ya que su producto debe competir con la llegada masiva de miel procedente de los países asiáticos, donde no existen los estrictos controles sanitarios que encarecen la producción propia de Catalunya, explica Biosca.
Y, finalmente, el aumento de costes de la producción consecuencia de la subida del precio del combustible, la necesidad de más mano de obra y de alimento complementario para las abejas. A todo ello se suma el encarecimiento de todos los productos sanitarios y de envasado. Según Eloi Biosca, la única salida que queda es buscar espacio en la comercialización directa, pero “muchos no podrán aguantar” mucho más.A sus 43 años Eloi Biosca ha estado toda su vida en contacto con la miel, hoy regenta una empresa familiar que ya inició su padre Pere. En 2006 crearon en Sant Guim de Freixenet la marca Mel Sant Guim.
Los apicultores urgen ayudas contra la avispa asiática
Unió de Pagesos y organizaciones apícolas catalanas reclamaron ayer al departamento de Acción Climática recursos para el control de la avispa asiática (vespa velutina), con la colocación de trampas. Afirman que es “el método más efectivo para paliar los graves daños que causa en las colmenas”.
Calculan que esta especie invasora afecta al 45% de las colmenas en Catalunya, mientras que en la provincia de Lleida la tasa se sitúa en el 20%. Estiman en cerca de 2,5 millones de euros las pérdidas totales en la cosecha de miel de otoño porque esta avispa “saquea las colmenas”. En la demarcación serían 347.942 euros.
El coste medio de eliminar un nido de avispa asiática puede rondar los 300 euros, mientras que las trampas para reinas y su mantenimiento tienen un coste aproximado de 10 euros. Unió de Pagesos y las entidades apícolas consideran “esencial” que todo el sector y las administraciones se impliquen para luchar contra la avispa asiática y, por ello, entienden que “también habría que incentivar que la eliminación de nidos se llevara a cabo en todos los municipios afectados”. “Esta avispa se sitúa frente a la apertura de la colmena por donde entran las abejas y espera que éstas vuelvan cansadas y cargadas de néctar o polen para cazarlas más fácilmente”, explicaron.