El sector de la fruta advierte que no puede soportar otra campaña igual

Cuando se cumple el primer aniversario de las devastadoras heladas de abril de 2022, el sector advierte que muchos no podrían soportar otra campaña con nuevas pérdidas de producción e ingresos. Todo ello en un momento en el que el llano de Lleida se encuentra en riesgo de heladas, aunque se confía en que la bajada de los termómetros no sea tan importante como hace doce meses, cuando el hundimiento de las temperaturas llegó en muchas zonas a los seis grados negativos y, además, se repitió durante varias noches seguidas. Los productores de Lleida perdieron el 70% de su potencial productivo de fruta de hueso y los repuntes en los precios no compensaron el hundimiento de la oferta.

En el caso de la manzana y la pera, como publicó SEGRE el domingo, Afrucat alerta de una campaña de comercialización “corta” y que faltará producto por la caída de la cosecha por las heladas, primero, y por las olas de calor a lo largo del verano, después. Los últimos estocks de la fruta en las cámaras de frío que datan del mes de febrero estiman un 28% menos de peras y cerca del 43% con respecto a las mismas fechas del año pasado. Las heladas llevaron a Agroseguro a indemnizaciones históricas en Lleida, en torno a los 90 millones de euros, mientras que el departamento de Acción Climática puso en marcha un plan de ayuda que suponía el reparto de 16 millones entre los payeses en Catalunya, aunque la mayoría se repartió entre los productores de Ponent.

Los sistemas de lucha contra las heladas en las fincas son diversos, desde los ventiladores hasta el riego por aspersión, pero su elevado coste y los problemas que atraviesa el sector hacen que buena parte las fincas no tengan cobertura. Por ejemplo, plantar hoy una hectárea puede suponer un desembolso de 50.000 euros por hectárea, sin tener en cuenta el valor del propio terreno. Solo los plantones pueden representar de 9.000 a 12.000 euros por hectárea, a los que hay que sumar los propios costes de plantarlos, más la protección de los árboles jóvenes frente a los conejos y los sistemas antigranizo, con unos 22.000 euros, otros 5.000 en caso de apostar por el riego por goteo y los entre 7.000 y 8.000 si se incluye el riego por aspersión como fórmula para intentar minimizar daños por heladas.En caso de que la meteorología no cause estragos, como las temidas heladas o el pedrisco, el sector confía en tener una producción buena en cantidad y calidad esta campaña.