GANADERÍA CRISIS
El coste de la paja se dispara 70 euros por cada ternero
Los ganaderos urgen ayudas ante unos precios insostenibles || La tonelada se ha encarecido del orden de cien euros por tonelada
El coste de la paja necesaria para poder abastecer las necesidades de cada ternero se ha disparado en 70 euros anuales, una cifra inasumible para el sector, según denuncian la organización de productores Asoprovac, junto con la Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya y JARC. El incremento de costes “se hace especialmente duro en un año en que el vacuno ha consolidado la drástica reducción de ingresos vía Política Agraria Común (PAC)”, alertan estas organizaciones. Aseguran que el precio de la paja se encuentra unos cien euros por tonelada por encima de lo que se pagaba hace un año.
En este contexto, alertan que la necesidad de abastecimiento de los productos agrarios de primera necesidad para el sectortdel vacuno de carne “hacen necesario adoptar medidas excepcionales con el fin de evitar consecuencias irreparables como la pérdida de nuestro tejido ganadero bovino”. Dicho de otra forma, si no se adoptan medidas de apoyo, esta crisis provocada por la sequía y unos costes inusitados puede obligar al cierre de explotaciones.En este contexto, han recordado a la conselleria de Acción Climática que el forraje y en especial la paja son para el vacuno de carne productos esenciales para el correcto equilibrio nutritivo y sanitario. También para sus condiciones óptimas de bienestar, sin que en la actualidad, afirman, se disponga de ningún producto alternativo.
Por ello, no entienden que, como gran consumidor de materias primas fibrosas, el vacuno de carne haya quedado al margen de la situación de sequía articuladas hasta el momento.Además, las organizaciones de vacuno de carne recuerdan que pese a que los precios de la carne están en cotas elevadas, el incremento de los costes sitúa a los ganaderos en un contexto complicado. De hecho, recuerda que el 60% de los costes de producción de los ganadores llegan de la mano de la alimentación de las reses. Piden ayudas para que sea viable la importación de paja, pero también urgen que se prohíba, de manera transitoria, la utilización de este producto para usos energéticos para que se destine a la cabaña ganadera.