Investigación puntera en porcino de Vall Companys

La investigación constante permite mejoras no solo económicas, sino medioambientales para las empresas y la sociedad en general. Un ejemplo es el caso de Vall Companys y su granja 5.0, ubicada en Alcarràs y que se ha convertido en el banco de pruebas para la producción porcina de la compañía, con un total de 45 culminadas desde su puesta en funcionamiento en el año 2018. Entre sus resultados destaca el programa Neutralpork, la producción de piensos compuestos con menor huella ambiental. Por una parte, reduce 20% la utilización de soja, con cereal importado fundamentalmente de países americanos, con lo que rebaja un 25% la huella de CO2. Además, representa una reducción de costes en el caso de la soja de entre un 3 y un 4% en la elaboración de los piensos. También ha rebajado entre un 55% y un 50% el nitrógeno en los purines de los cerdos sobre la referencia estimada por la Generalitat. En un momento de sequía como el actual, también destaca que la fórmula de alimentación de los animales permiten reducir en 25 litros por cerdo el gasto de agua, lo que supone un 3,5% menos.

Otro aspecto clave en la producción es el bienestar animal, eje del proyecto Welfare+. Incluye la puesta en marcha de sistemas de refrigeración conocidos como cooling, basados en paneles de refrigeración y que reducen el estrés térmico de los animales. Estamos hablando de soluciones especialmente importantes en verano y en zonas como Lleida, donde se registran temperaturas altas. Las investigaciones en la Granja 5.0 también han permitido demostrar, por ejemplo, que la utilización de la paja en los corrales permite reducir en un 40% los comportamientos agresivos. La aplicación de la fibra en los piensos también ha permitido reducir las patologías digestivas.

Pretende que el ganadero pueda tener el control de los animales desde el móvil sin estar en la granja

Vall Companys ha destinado 2,8 millones de euros a la construcción de esta Granja 5.0 y año tras año ha ido apostando por la financiación de sus proyectos. El Grupo destina el 0,6% de su facturación a investigación y desarrollo, que en 2022 alcanzó los 3.010 millones de euros.

Inteligencia artificial en ganadería y vigilar hasta las toses de los cerdos

Vall Companys utiliza la inteligencia artificial para la mejora de la producción porcina. Por ejemplo, uno de sus trabajos permite diferenciar el ronquido del cerdo de una posible tos. De esta manera, el productor y el veterinario se pueden adelantar en la detección de un problema sanitario y evitar que este se extienda en el corral o la granja. Otro de los proyectos aplica la visión artificial para determinar el peso de los cerdos durante la crianza de los animales. De esta manera, se puede saber si las reses tienen un nivel de alimentación e hidratación óptimos. Así lo explica Joaquín Terés, director de sistemas industriales del Grupo Vall Companys. Indica que la Granja 5.0 cuenta con Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), el Internet de las Cosas (IoT) e Inteligencia Artificial (IA), sistemas de automatización y análisis de datos con objetivos claros en el proceso de bienestar de los animales, la sostenibilidad del proceso y la productividad. Pau Aymerich, investigador, y responsable de nutrición animal, indica por ejemplo que solo en materia de nutrición y sostenibilidad se han llevado a cabo 31 pruebas diferentes con el objetivo de reducir el nitrógeno en las deyecciones ganaderas. A raíz de estos últimos casos de investigación interna, el Grupo Vall Companys ha impulsado Nealia, que califica como spin off (empresa creada en el seno del grupo agroalimentario leridano) al servicio del sector. El proyecto crea soluciones digitales para aumentar la eficiencia, optimizar procesos, mejorar la sostenibilidad, el bienestar animal y facilitar el día a día del granjero con el manejo y el mantenimiento de las granjas. Nealia fue creada hace tres años y el objetivo no solo es servir a negocios del propio grupo, sino también a terceros dentro del sector cárnico. Facturó medio millón de euros en el último semestre del año pasado.Su principal foco de interés es dotar al granjero de herramientas digitales para que pueda controlar su granja desde el móvil: desde regular y supervisar el ambiente de su granja hasta conocer los niveles y consumos de pienso y agua. Dicho de otra forma, pretende facilitar la vida al ganadero y cuidar de los animales sin tener que estar en la granja.