LLEIDA
Lleida aumenta la exportación de fruta, pero a precios más bajos
El año pasado facturó una media de 1,22 euros por kilo, un 6,36% menos que en 2022
Tras un ejercicio marcado por las heladas, el pasado le tocó a la sequía
No hay dos campañas frutícolas iguales y con ellas, tampoco los resultados económicos para agricultores, cooperativas y centrales. En 2023, Lleida aumentó el volumen y la facturación de las exportaciones, pero lo hizo con una cesión de precios a la baja al existir una mayor oferta, en especial de las especies típicas del verano (melocotones, nectarinas y paraguayos), de mayor comercialización exterior desde las comarcas de Ponent. La cesión de precios fue de un 6,36%.
El año pasado Lleida incrementó el volumen de fruta exportada, rozando los 400 millones de kilos, frente a los poco más de 322 millones del ejercicio anterior, lo que supone un incremento de más de un 24 por ciento. Así se desprende de los últimos datos oficiales hechos públicos por el ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Esta evolución se explica por razones productivas. El 2022 fue un año nefasto en cuanto a volúmenes de cosecha porque las heladas de inicios del mes de abril diezmaron los kilos que salieron de las fincas leridanas. De hecho, la conselleria de Acción Climática estima que la caída fue de un 70% con respecto al potencial productivo de las explotaciones de la demarcación, con apenas 149.570 toneladas. El año pasado, los problemas llegaron de la mano de la sequía, primero por el riesgo de que no hubiera suficiente agua para garantizar las producciones, luego por las mermas en calibres. La cosecha se dobló con respecto a un 2022 pésimo hasta llegar a las 406.630 toneladas.
El ministerio de Comercio cifra en 490,61 millones de euros la facturación de la exportación frutícola le año pasado, frente a los casi 423 del ejercicio anterior. Representa un aumento del 16,01%, es decir, que el aumento es ocho puntos inferior al experimentado en volumen de kilos. Dicho de otra manera, se han vendido más kilos, pero a un precio más barato. En concreto, la facturación media por kilo de fruta enviada a otros países fue de 1,22 euros. Un año antes, cuando el volumen disponible era muy inferior, había alcanzado los 1,31 euros por kilos. Estamos hablando de nueve céntimos menos por kilo, que equivale a un 6,36 por ciento.La patronal estatal del sector, Fepex, explica que la exportación española de frutas y hortalizas frescas en 2023 retrocedió un 6% en volumen con relación al año anterior, totalizando 11,3 millones de toneladas, pero se elevó en el mismo porcentaje en valor, hasta los 16.855 millones de euros, con un crecimiento de la importación del 7% en volumen y del 19% en valor. En concreto, la caída del volumen exportado fue más notable en las frutas, con un 7,7% menos que en 2022, totalizando 6,2 millones de toneladas, mientras que el valor crece un 1%, situándose en 8.972 millones de euros. Cayeron los cítricos y los frutos rojos, pero creció la fruta de hueso, que capitanea Lleida.
La demarcación marca un nuevo récord de comercio exterior
Las exportaciones de las empresas de Lleida marcaron un nuevo récord el año pasado, hasta los 2.925,3 millones de euros, una cifra que representa un aumento del 0,8%. En los dos ejercicios anteriores, el crecimiento había sido de dos dígitos. Llegó al 17% en 2021 y se situó en el 15,5% en el 2022. El sector agroalimentario sigue impulsando el comercio exterior de la demarcación con el grupo de frutas, hortalizas y legumbres a la cabeza, seguido de grasas y aceites y productos cárnicos, según los datos hechos públicos por el ministerio de Industria, Comercio y Empresa. Lasagroalimentarias vendieron 1.843,5 millones.