La sequía dejó en Lleida pérdidas de 200 millones y arrasó el cereal y la oliva

La sequía se llevó por delante en 2022 y 2023 prácticamente la cosecha de cereal de un año de Lleida, causó pérdidas de casi 200 millones de euros en los dos principales sistemas de regadío, el Canal d'Urgell y el Aragón y Catalunya, especialmente en el primero, y provocó aumentos de los costes de más del 25% en el sector porcino y el bovino.

La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) dió ayer por terminado el último episodio de sequía que ha durado dos años y medio desde la primavera de 2021 hasta finales de 2023. Ha causado pérdidas de más de 200 millones de euros en regadíos, que son los estimados en el Canal d’Urgell, principal perjudicado en Lleida ya que tuvo que cerrar el Principal a finales del abril; y el Aragón y Catalunya, según el informe del organismo de cuenca que avanzó ayer su presidente, Carlos Arrazola, aunque quedan por valorar otras comunidades de regantes. Para el Segarra-Garrigues la del 2023 fue la peor campaña desde el inicio del regadío en 2009 ya que no se pudieron regar 4.700 ha de cereal y maíz en favor del otros de cultivos, principalmente frutales.

De hecho, las producciones que mayores daños sufrieron como consecuencia de la sequía fueron las de cereales, con una reducción del 47% en 2023 en el caso del trigo (-107.000 tn) y otra del 62% en el maíz (-212.000), y la de oliva (-47%, -22.600) mientras las del arroz y el forraje registraron mermas de menos del 10%. Por el contrario, las cosechas tanto de fruta como de uva superaron los promedios de los últimos años, en un 17% (+60.000) en el primer caso y en un 11% (+4.000) en el segundo. “En Lleida ha habido zonas donde no han cosechado nada, dedicándose a hacer forraje y recoger paja para las vacas y el rebaño hasta las lluvias de mayo”, señala el informe de la CHE en el caso del forraje, que resulta sintomático de la dispersión territorial del balance de los daños, ya que mientras el caudal suministrado por el Canal Principal del Urgell se quedaba en el 33,7% del habitual y el del Segarra-Garrigues en el 66%, el Auxiliar del Urgell, el Aragón y Catalunya y el Algerri-Balaguer superaban el 90% y Pinyana el 80%.La menor disponibilidad de vegetales elevó los costes de engorde del ganado: por encima del 25% en el porcino y del 35% en el bovino y más del 20% tanto en corderos como en pollos. Y redujo el margen de la venta al disparar los costes del tráfico marítimo en más de 10.000 euros por flete por el aumento del tráfico de mercancías.

La producción de pera en Catalunya cae un 33% por la sequía y las altas temperaturas

Acción Climática y Afrucat prevén que la cosecha de pera de esta campaña se reducirá hasta un 33% en Catalunya este año, con una importante merma en la variedad más impòrtante, la Conference, “arrastrada los efectos de la sequía” de la anterior primavera y del calor del año pasado y el pasado invierno.

Así, el estrés hídrico ha afectado a los árboles especialmente en la época previa a la cosecha, ya que provoca problemas de inducción floral en el año siguiente, según explicó el director de Afrucat manel Simon.En total, está prevista una producción de 80.426 toneladas de pera, con un descenso de todas las variedades salvo la Blanquilla, por lo que el sector “priorizará el mercado estatal como destino principal”.Por variedades, se prevé que con 33.693 toneladas la producción de pera Conference catalana disminuya en esta campaña un 45%; en pera Limonera un 15% (14.458 toneladas); pera Williams y Barlet un 34% (12.567 toneladas; per Ercolini (-27%) hasta las 3.939 toneladas y otras variedades de verano pueden tener una merma de un 26% en su producción, hasta las 9.514 toneladas. La única variedad que se prevé que aumente su producción es la pera Blanquilla, con un aumento del 20%, hasta las 6255 toneladas.Respecto a la calidad de los frutos, Simon prevé que sea “buena calidad y con buenos calibres, algo especialmente interesante para afrontar la comercialización en el mercado estatal”. Todo ello debería ayudar a “defender los precios” y los intereses de los productores catalanes, aunque todavía es pronto para hablar de ello, añadió.

Simon dijo que este bajón productivo en Catalunya, a la espera de los datos oficiales a nivel europeo que se den en los próximos días en Interpera, también lo habrían sufrido otros países competidores, por lo que se espera una “falta generalizada de algunas peras más que otras”. En este contexto, el sector priorizará el mercado interno en vez del de la exportación, dijo el director de Afrucat. De hecho, Simon adelantó que uno de los retos del sector a medio plazo es “reconquistar el mercado estatal, como ocurre con el melocotón” ante la caida del consumo generalizado de fruta.Además, la patronal catalana de la fruta avanzó que de persistir los problemas que acompañan al cambio climático a la producción frutícola en Catalunya, “se debería optar por adaptar la producción y potenciar las variedades resistentes al contexto climático”.

Aconseja instalar ya el riego presurizado

El presidente de la CHE, Carlos Arrazola, aseguró que más de 40% de la superficie de la cuenca del Ebro está pendiente de modernizar. En esta extensión se encuentra todo el Canal d’Urgell, gran parte de Pinyana y algo del Aragón y Catalunya. Ante futuros episodios de sequía convendría implantar el riego a presión en toda su área para lo que deben contar con las subvenciones de la Administración y la aportación de los regantes para pagar su parte.

Máximo respeto en los dos años del episodio

Durante los dos años y medio que ha durado el último periodo de sequía desde marzo de 2021 hasta finales del pasado año, Arrazola indicó que se ha sido muy escrupuloso con la vigilancia de los caudales ecológicos y que ha habido muy pocas incidencias al respecto. En agosto del pasado año los Agentes Rurales abrieron cinco expedientes a regantes y una central hidroeléctrica por no respetar estos caudales en la cabecera del Segre.

Embalses a más del 90% y aportación alta

Los embalses de Lleida superan el 90%, con Canelles (34%) y Rialb (57%), los de mayor tamaño, y Santa Anna (83%) como excepciones. Tras casi tres años de sequía ha habido un incremento de las aportaciones de los ríos: 783 hm³ en el Pallaresa en Talarn, 431 en el Ribagorçana en El Pont de Suert y 215 del Valira y 217 del Segre en La Seu. Cierra el círculo la previsión de que haya nieve (12 hm3) en julio en el Ribagorçana y de que caiga en el Pallaresa.

El Urgell todavía no confirma el sexto riego

El Canal d’Urgell decidió ayer demorar la asignacion de un sexto riego a la espera de aumentar más las reservas en el Segre. El presidente, Amadeu Ros, indicó que se está a la espera de nuevas precipitaciones este fin de semana. Por su parte, el Manifest Gran Urgell criticó la demora en el pago de las ayudas por el cierre del Canal d’Urgell y el Segarra-Garrigues el pasado año ya que de 12.000 solicitudes presentadas 7.500 no han recibido respuesta.