Guardianes de las semillas del Pallars Jussà
Semillas de Oportunidad, un proyecto de la cooperativa Alba Jussà
Recuperar las variedades de hortalizas del Pallars Jussà y, al mismo tiempo, generar ocupación para las personas más vulnerables son el objetivo que persigue el proyecto Semillas de Oportunidad que la entidad Alba Jussà puso en marcha el año 2018 y que, el mes de marzo pasado, empezó a dar sus frutos con la salida a la venta de las primeras cuatro variedades de semillas de una colección que se irá ampliando. El cimiento de este proyecto no es ningún otro que los padrins y padrines de la comarca que, durante años, han conservado estas semillas autóctonas y las han cultivado, guardando la singularidad, a pesar de las nuevas y más modernas variedades.
Variedades
Este es el caso de un vecino de la localidad de Torallola que, con 97 años, todavía cultiva su huerto y es quien ha aportado las semillas de la tomata punxeta, una variedad de tomate en rama que, según explica, “se llama así porque su base acaba en punta. La planta forma un racimo y da muchos frutos”. A la pregunta de cómo obtenían el plantel, responde que “depositábamos las semillas en el estiércol que los animales de pata redonda habían producido el año anterior y, con el calor, brotaban enseguida”.
Otra variedad de tomate que también se ha recuperado es la rosada de l'Horta del Riu Flamisell, cuya semilla ha aportado Rosa, una vecina de la Pobla de Segur de 97 años que asegura haber cosechado piezas que pesaban unos cuatro kilos. Esta diestra hortelana pallaresa habla con entusiasmo de otro de sus productos, las cols de ruc. "Son para el alimento de los animales y siempre las hemos cultivado nosotros; las guardamos de toda la vida, no las hemos comprado nunca”, asegura. Aunque hay semillas que no están todavía en el catálogo, a buen seguro que merecen formar parte de él, como las cebollas o las calabazas de rabequet, que son algunas de las otras variedades que estos prestigiosos horticultores han cultivado en sus vergeles pallareses.
Oportunidades laborales para personas vulnerables
El proyecto de la Cooperativa Alba Jussà tiene su origen con la prospección de diferentes zonas del Pallars Jussà para visitar los huertos e identificar aquellas semillas guardadas o plantaciones en el mismo pueblo o huerto durante tres generaciones. Las entidades Salvatgines y Col·lectiu Eixarcolant son las encargadas de llevar a cabo los sondeos, es decir, las entrevistas que se iniciaron el año 2019 y que van a cargo de Albert Cereza, que, además de entrevistar y verificar su autenticidad, recoge las semillas. Una vez recogidas, se llevan a un banco que gestiona Alba Jussà y se guardan en condiciones óptimas para asegurar la viabilidad. Se inscriben en una base de datos, con la información de las entrevistas y, seguidamente, se vuelven a plantar a los huertos de la entidad, de tal manera que se cultivan conservando una caracterización de la variedad y detallando todas sus características morfológicas, organolépticas y otros trazos distintivos que se contrastan con la información que han dado los hortelanos. Todas las tareas del huerto y la manipulación de las semillas van a cargo de las personas del Espai Alba Jussà, con el objetivo de fomentar el aprendizaje a través del cuidado de las hortalizas así como la memoria de la tradición y conocimientos de los antepasados, cosa que brinda nuevas expectativas laborales a los integrantes del proyecto.
TRES GENERACIONES
Las semillas recogidas han tenido que ser guardadas o plantadas en el mismo pueblo durante cincuenta años.