Obsesión borbónica

Camil Bosch Ignés acaba de cumplir 70 años. Nacido en Bellpuig en 1952, estudió derecho y, tras abrir un despacho en Barcelona, acabó trabajando en una empresa privada de México durante muchos años. Ahora, ya jubilado y de regreso a casa, se ha convertido en escritor. Tras su debut con Els ocells d’en Martí, un cuento infantil inspirado en sus nietos Martí y Júlia, encuadrado en un proyecto solidario para la Obra Social de Sant Joan de Déu, ha publicado su primera novela larga, Jo, per si de cas, me’n vaig (para más información entrar en www.camilbosch.cat), en la que narra las andanzas de un abogado, Quim Pladevall Bonet, que está obsesionado con la familia borbónica española y que ha de abandonar el país y afincarse en México para intentar hallar una solución a su sinvivir. Escrita en clave de humor, no esconde la influencia de Eduardo Mendoza, su referente, pero también de Ferran Torrent, Tom Sharpe o Quim Monzó. Lo del nombre del protagonista obedece al hecho,

según explica a Cercle, de que Quim es un nombre común en la familia; Pladevall, inspirado en la fijación de la ll final que tienen los castellanoparlantes y los mexicanos, Bonet, por ser el apellido materno. La novela, que ya va por su cuarta reimpresión, nace en clave de humor tras su paso por la Escola d’Escriptura de l’Ateneu de Barcelona y está llena de guiños como los de Juan Carlos Rey (el psicólogo de cabecera del protagonista) u otros protagonistas como Tribuno Llarena Marchena, Cifuentes Ayuso, José María Aznar, Nicasio Baena Capitán De los Cobos o Carlos Froilán de los Santos Ortiz. En el texto aparecen referencias, además de México, de Tornabous, Bellpuig, el Castell de Ciutadilla, Lleida, o la Vall del Corb. Mientras prepara su nueva novela, Camil Bosch reconoce que en Jo, per si de cas, me’n vaig hay mucho de ficción, evidentemente, pero también vivencias personales de su estancia en México.

DEBUT LITERARIO

Su debut como escritor se produjo con ‘Els ocells d’en Martí’, inspirado en sus nietos Martí y Júlia