Cal Marina, el cine de Anglesola

Anglesola, localidad del Urgell de poco más de 1.300 habitantes, está de celebración. El pasado 13 de agosto se conmemoraron los 90 años de la primera proyección de un film sonoro en Cal Marina, un local polivalente, aún en activo, y que ya es, por derecho propio, el local más antiguo de Anglesola. La película que pudieron ver los vecinos y vecinas del pueblo fue Eran trece, un thriller de aventuras dirigido por David Howard y protagonizado por Juan Torena y Manuel Arbó, que no era otra cosa que la versión latina –una práctica muy habitual en el Hollywood de los años 30– de Charlie Chan Carries On, una de las entregas de la franquicia protagonizada por el detective chino afincado en los Estados Unidos creado por Earl Derr Biggers. Cal Marina, según explica a Cercle Diana Ruera, una de las actuales responsables del establecimiento, comenzó como un local de “parada y fonda” en la ruta hacia Balaguer y Lleida a base de cafés, comidas, vermuts y licores. Luego, ya plenamente consolidada como empresa de restauración con el abuelo Antonio Ruera y sus hijos Ramon Ruera y Dolors Vallés Albareda, se iniciaron en la proyección de cine mudo en un almacén contiguo al establecimiento para, ya con los padres de los responsables actuales, Antonio Ruera y Ana Casteràs, además de ser un bar restaurante, convertirse en el cine de Anglesola desde 1932 –emisión de primer film sonoro– hasta 1979. La celebración del 90 aniversario del acontecimiento, gracias a la iniciativa de Toni Gassó, anglesolense afincado en Barcelona y que está rodando un documental sobre el tema, consistió en la proyección de films silentes y una exposición sobre la Anglesola de los años 30.

EL DETALLE

El estreno del sonoro en Anglesola

El 13 de agosto de 1932, Cal Marina de Angesola proyectó su primer film sonoro: Eran trece, dirigida por David Howard y que era la versión latina de un film del mítico detective Charlie Chan.