La Ruta Ignasiana, ahora en bicicleta

Si primero se trataba de una caminata, aunque el objetivo sea el mismo, ahora se trata de una ruta en BTT: descubrir la Ruta Ignasiana rememorando el trayecto que en 1522 realizó San Ignacio de Loyola tras su reconversión espiritual que le hizo abandonar las armas para convertirse en un siervo de Dios hasta crear, años después, la Compañía de Jesús y ser uno de los padres de los denominados “ejercicios espirituales”, todavía vigentes hoy en día.

La Ruta Ignasiana recrea el itinerario del santo desde su casa natal en Azpeitia (el nombre de Loyola lo adopta de la ciudad donde se ubicaba el hospital donde fue cuidado de sus gravísimas heridas sufridas en el campo de batalla) hasta Manresa. Un peregrinaje de unos 650 kilómetros y 27 etapas que discurren entre las comunidades autónomas de Euskadi, La Rioja, Navarra, Aragón y Catalunya.

A su paso por Lleida, la ruta atraviesa el Segrià, el Pla d’Urgell, Urgell y La Segarra, aunque se desvía, a su paso por Verdú, para incluir en el trayecto la visita a la casa natal, ahora santuario, de Sant Pere Claver, misionero jesuita nacido en esta localidad leridana.

La meta está establecida en la Cova de Sant Agustí de Manresa, donde el santo se recluyó para orar y preparar su viaje a Jerusalén, en Tierra Santa, y su posterior desplazamiento hasta Roma, donde concluiría su apostolado hasta su muerte en el año 1556.

Este pasado mes de septiembre se celebró la Ruta Ignasiana en BTT con más de 150 deportistas inscritos. En julio (como ya se hizo eco Cercle) tuvo lugar la segunda edición de la caminata, con 50 andarines y 11 kilómetros de recorrido, organizada por la Oficina Municipal de Turisme de Verdú, localidad volcada con este evento. El trayecto sobre las dos ruedas discurrió,a lo largo de 115 kilómetros, desde Verdú, cubriendo las tres últimas etapas de la ruta, hasta la meta final de Manresa, pasando por Cervera, Montmaneu, Igualada, Sant Pau de la Guàrdia, Marganell, la falda de Montserrat hasta la Cova de Sant Ignasi, en Manresa. En total, la prueba discurrió a través de 19 municipios y cuatro comarcas, rememorando no solamente un histórico viaje, sino descubriendo un paisaje muy poco habitual en este tipo de recorridos cicloturistas.

TODO UN CLÁSICO

Todo un clásico La Ruta Ignasiana discurre a través de 115 kilómetros por Verdú, Cervera y Montmaneu hasta llegar a la meta, en Manresa

LAS CLAVES

TRADICIÓN

Recreación de la ruta de Loyola a Manresa

En 1522 San Ignacio de Loyola, que vio la luz de santidad ya en su madurez, se desplazó desde su ciudad natal hasta Manresa, antes de partir hacia Jerusalén, en Tierra Santa, para cerrar su círculo de conversión espiritual que tuvo lugar en Loyola.

UN TOTAL DE 650 KMS

Un trayecto que pasa por cinco autonomías

La denominada Ruta Ignasiana discurre a través de 27 etapas y un total de 650 kilómetros atravesando Euskadi, La Rioja, Navarra, Aragón y Catalunya, desde su casa natal en Azpeitia hasta la Cova de Sant Ignasi, en Manresa.

DE MILITAR A RELIGIOSO

Fundador de la Compañía de Jesús

San Ignacio de Loyola (1491- 1556) fue un destacado militar, por tradición familiar, que envainó la espada tras ser herido de gravedad en la defensa de Pamplona (1521), sitiada por las tropas francesas. En el hospital rehizo su vida para acabar fundando la Compañía de Jesús y los ejercicios espirituales.