La piscifactoría de Peramola saca al mercado su primer caviar de trucha

La piscifactoría Troutfactory SL de Peramola ha comercializado este año su primera producción de caviar de trucha de la que ha vendido 1.500 kilos, principalmente en el sector de la hostelería y el catering nacional, entre ellos, restaurantes de Lleida y Barcelona, y también en Alemania. Es un mercado “con posibilidades de crecimiento” y por el que se quiere apostar, según el director de producción del centro, Ángel Zabala. Aparte del caviar, se vende para ahumar la carne de trucha de peces hembra de 4 quilos de peso. La producción del caviar de trucha dura dos años, por lo que, según Zabala, para 2017 esperan llegar a una cifra “similar” a la de este año y ya será en 2018 cuando esperan “incrementar” las cifras que saldrán a la venta que se hace al por mayor, para envasadores que luego comercializan el caviar, aunque prevén “crear una marca propia de este producto muy valorado en la alta gastronomía”. Troutfactory SL comercializa, además, trucha, este año un total de 1.000 toneladas, y esturión, con una producción de 7 toneladas, tanto frescas como congeladas. La mayor parte, un 75%, la exporta a países como Polonia (50%) y Alemania (25%), y el resto a España (25%). La piscifactoría dispone también de una parte de cría de esturión para producir caviar. Las hembras tienen ahora 7 años y calculan que debido a la fría temperatura del agua (no disponen de mecanismos para calentarla) hará falta que pasen 7 más para poder disponer de la primera producción caviar de esturión. Troutfactory SL tiene a plantilla de 30 trabajadores. Zabala remarcó que esperan cerrar 2016 con una facturación de 3 millones de euros, que representa un incremento del 20% respecto al pasado año.

Troutfactory SL es el nombre de la nueva piscifactoría después de que Vinevo Group SL, formado mayoritariamente por inversores rusos, adquiriera Truchas del Segre a raíz del concurso de acreedores. El cierre de la piscifactoría y el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de 2011 dejó en el paro a 28 personas que trabajaban entonces en el complejo de Peramola. Fuentes de Vinevo Group indicaron ayer que la empresa no ha asumido las deudas de la anterior firma Truchas del Segre.