ESNOTICIA
Balaguer trabaja a destajo para volver a la normalidad tras las inundaciones
Balaguer intentaba ayer recuperar la normalidad tras la lluvia torrencial del viernes por la noche. La tormenta dejó más de 70 litros por metro cuadrado de los que 57 cayeron en apenas media hora. La plaza Mercadal y su entorno es la zona más afectada. Decenas de establecimientos no pudieron abrir y los daños son de cientos de miles de euros.
Balaguer se despertó ayer conmocionada por los estragos causados el viernes por la noche por un aguacero torrencial que llegó acumular unos 71 litros por metro cuadrado, 57 de ellos en apenas media hora (ver SEGRE de ayer). La zona más afectada fue el centro histórico, y especialmente, la plaza Mercadal y su entorno porque la pendiente provocó que el agua bajara de manera torrencial por las calles, llegando a arrastrar varios coches que ayer fueron retirados por las grúas. También continuaba desalojada la pareja que vive en la casa situada en el número 9 de la calle la Creu, inmueble que se derrumbó parcialmente. La vivienda colindante, la del número 7, también mostraba un enorme boquete. Espacios municipales como el complejo deportivo, especialmente la piscina cubierta, y el teatro igualmente resultaron afectados y continuaba cortado al tráfico el tramo de la avenida Francesc Macià que enlaza con la C-12. A nivel particular, decenas de establecimientos no pudieron abrir sus puertas y muchos vecinos, equipados con botas, mangueras, escobas y fregonas, trabajaron a destajo para achicar el agua que se acumulaba, principalmente en los bajos. Bomberos y operarios del ayuntamiento también trabajaron durante todo el día, desde la madrugada, para quitar el barro y los escombros arrastrados por los torrentes que desembocaron en el río Segre. La fuerza del agua también arrancó una gran cantidad de losas de piedra de la plaza Mercadal delante del ayuntamiento y que pesan más de 20 quilos.
“El primer objetivo, tras comprobar que los daños son solo materiales, es intentar recuperar la normalidad cuanto antes”, explicó el alcalde de la capital de la Noguera, Jordi Ignasi Vidal. El ayuntamiento cortó al tráfico el entorno de céntrica la plaza Mercadal para que las máquinas pudieran trabajar y se suspendió el mercado semanal por razones obvias. Asimismo, el consistorio, el consell de la Noguera y la asociación Dones Almatà mantienen para hoy la celebración de la Fira d’Entitat en la céntrica plaza Mercadal. Fuentes municipales señalaron ayer que tras trabajar todo el día limpiando este espacio estará preparado para acoger hoy el certamen. No obstante, el acceso será por la calle Miracle al permanecer cortado el pasaje Gaspar de Portolà de donde se despegaron la mayoría de adoquines de la vía. Muchos ciudadanos también se acercaron ayer a la zona para ver los destrozos e inmortalizar un panorama que muchos equiparaban a la riada del Segre de 1982. Coincidían en destacar que una tromba de agua de estas características nunca la habían visto.