La mejora de la catedral de La Seu, en su ecuador

El equipo que rehabilita la Catedral de La Seu d’Urgell trabaja a buen ritmo en su restauración por lo que las obras han llegado a su ecuador. Los trabajos empezaron a finales del pasado mes de marzo y se centran ahora en la zona de los claustros, que estos días presentan una imagen llena de andamios y puntales para reforzar las tareas de los operarios. Una actuación que no impide que el templo siga abierto al público. Los turistas siguen acercándose para visitar el conjunto catedralicio de La Seu d’Urgell, declarado Bien Cultural de Interés Nacional en 1931 y única sede catedralicia íntegramente románica de Catalunya. Aunque las instantáneas que pueden tomar son diferentes a las que podrán hacer a principios del próximo año 2017, cuando la rehabilitación deberá llegar a su fin. Las obras tienen como objetivo garantizar la impermeabilización de las torres, ya que se habían detectado problemas de filtraciones de agua, así como las cubiertas del ábside y del cimborrio. Los trabajos inciden en la restauración de los elementos estructurales de todo el conjunto arquitectónico así como las alas norte, este y oeste y las paredes interiores del claustro. Un equipo de restauradores trabaja para limpiar todas las impurezas de los elementos arquitectónicos del claustro, entre ellos los cincuenta capiteles y sus columnas. Aparte, también aprovechan para retirar humedades detectadas en el exterior del monumento. Los operarios están construyendo también una escalera de seguridad para que sea posible llegar con garantías a la parte superior de la torre, desde donde tanto fieles como turistas podrán disfrutar de unas excelentes vistas de La Seu y de su entorno. La rehabilitación está incluidas el plan estatal de Catedrales y cuentan con la inversión que ronda los 700.000 euros, sufragados por el ministerio de Cultura.