HACIENDA RECAUDACIÓN
Cerrados en Lleida 13 puntos de cobro de impuestos de la Agència Tributària catalana
La Generalitat rescindirá el contrato que tiene con los registradores de la propiedad para la liquidación de impuestos || La hacienda catalana reforzará el servicio con 15 delegaciones más, dos en Lleida
Las 53 oficinas liquidadoras de impuestos cedidos a la Generalitat que actualmente hay en Catalunya (13 en Lleida) en virtud de un acuerdo con la Agència Tributària de Catalunya dejarán de funcionar como tales. La hacienda catalana prevé rescindir los convenios con los registradores de la propiedad que trabajan como liquidadores de estos tributos: transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentales, sucesiones y donaciones, entre otros.
Por el contrario, la Generalitat abrirá 15 nuevas delegaciones de la Agència Tributària en Catalunya en 2017, dos de ellas en las comarcas leridanas, en La Seu d’Urgell y Lleida capital. La voluntad del Govern es asumir todas las funciones tributarias que ahora hacen los registradores de la propiedad. El convenio con los registradores de la propiedad finaliza en realidad en octubre del próximo año, pero la Generalitat quiere denunciarlo y dejarlo sin vigencia en breve. Son 53 oficinas y 277 empleados en Catalunya. En Lleida, supone el cierre de las oficinas tributarias de Vielha, Sort, La Seu d’Urgell, Solsona, Tremp, Cervera, Tàrrega, Les Borges Blanques, Lleida (4 oficinas) y Balaguer.
En Lleida supone el cierre de las oficinas tributarias de las capitales de comarca que cuentan con una
Según la conselleria de Economia y Hacienda, en una segunda fase del despligue y con el objetivo de reforzar la proximidad del servicio de la ATC, la Generalitat asegura que el déficit territorial se cubrirá a través de las 142 oficinas de la red de ventanilla única de tributos de Catalunya que comparte con los ayuntamientos y las diputaciones. En este punto, la Generalitat prevé incorporar a los 277 empleados que hasta ahora liquidaban impuestos desde los registros de la propiedad. Por su parte, los registradores de la propiedad creen que la medida es errónea porque la Generalitat dejará de abonar los 25 millones de euros anuales que contempla el convenio. Además, advierten del riesgo de colapso, que puede ocasionar unas pérdidas de otros 300 millones anuales. Las oficinas de los registradores revisan un 1.000% más que las de la ATC y recaudan un 100% más. Asimismo, los alcaldes Les Borges, Balaguer, Tremp y Cervera apuntaron ayer que el cierre de estas oficinas no debe suponer la pérdida del servicio a la ciudadanía y que obligue a desplazamientos. No obstante, a la espera de tener más información, aseguraron que este servicio debería ser compensado con la red de ventana única tributaria disponiendo así de un servicio de proximidad a los vecinos como ahora.