Expertos piden una ley de caminos de trashumancia para protegerlos

La provincia de Lleida, pese a su gran tradición ganadera, carece a día de hoy de una clasificación de sus cañadas reales por parte de la Generalitat. La red agropecuaria catalana cuenta con unos 20.000 kilómetros de caminos trashumantes, de los cuales tan solo el 15% están clasificados y la mayoría de ellos están situados en la provincia de Tarragona. Es por ello que los expertos en la materia recomiendan la elaboración de una ley catalana y el desarrollo de políticas específicas que permitan preservar, catalogar y recuperar estos caminos. Esta demanda fue uno de los principales ejes de la jornada inicial del I Congreso de Trashumancia de Catalunya que tuvo lugar ayer en Lleida y que continuará el 21 de octubre en Santa Maria i els Monjos y el 28 de octubre en Tremp. Uno de los ponentes del congreso fue el geógrafo y périto judicial de caminos Xavier Campillo, quien afirmó que “la ley española sobre vías pecuarias de 1995, así como el Estatut de 1979 y el actual, otorgan la titularidad de dichas vías a las comunidades autónomas, obligándolas a investigarlas, protegerlas y clasificarlas”. Sin embargo, “zonas tan importantes en este sentido como el Pallars, Alt Urgell, Andorra y Cerdanya tienen la totalidad de sus vías por clasificar y, al ritmo que lleva la Generalitat, los 20.000 kilómetros de caminos trashumantes de Catalunya no estarán completamente clasificados hasta dentro de unos 500 años”, añadió Campillo.

El acto inaugural del congreso contó con la presencia del conseller de Territorio, Josep Rull, quien destacó la importancia de la red de vías pecuarias ya que “son un elemento básico para la cohesión territorial y una infraestructura blanda extraordinaria que funciona como un corredor biológico y, por lo tanto, son una pieza clave para la biodiversidad del territorio”.