INFRAESTRUCTURAS TREN
La línea de La Pobla pasa el examen de los discapacitados salvo en la capital
En la estación Lleida-Pirineus es necesaria una rampa para acceder a los convoyes
La Asociación de Paraplégicos y Discapacitados Físicos de Lleida (ASPID) avaló ayer la accesibilidad y movilidad de los nuevos trenes de la línea de La Pobla de Segur, salvo en la estación de Lleida-Pirineus en la que se necesita una rampa para poder subir o bajar del convoy. Una delegación de miembros de la entidad viajó hasta La Pobla de Segur y señalaron que la mayoría de las estaciones están perfectamente adaptadas para personas con discapacidad y valoraron muy positivamente la comodidad de los trenes. Según la presidenta de Aspid, Bibiana Bendicho, el tren es cómodo, accesible, panorámico y con muchos espacios para sillas de ruedas, no solo los reservados por ley (dos plazas), sino que la amplitud del convoy y la distribución de los espacios, posibilitan que haya espacios convertibles llegando hasta las cuatro plazas. Asimismo, respecto a las estaciones destacó la buena accesibilidad, tanto de distancia como de altura, “salvo la de Lleida en la que es necesario instalar una rampa porque la distancia entre el tren y el andén es de más de 15 centímetros, cuando la normativa (Gap) prevé 5 centímetros”. Ton Montardit, miembro de la junta de la entidad, destacó que ya que se contruyó una plataforma en el andén de Lleida para facilitar el acceso a estos nuevos trenes, se podría haber hecho respetando todas las distancias. Por otra parte, destacó que tiene muchas ventajas, “especialmente la posibilidad de adquirir el billete en el mismo convoy y sin reserva, algo que no nos pasa en los trenes de Renfe”, dijo. Además añadió buena flexibilidad horaria y la ampliación de los trayectos desde la entrada en servicio de los nuevos convoyes. Según Montardit otra de las ventajas de esta línea es la atención del personal que “es excelente y muy comprometida”, dijo.