Ven ‘descoordinación’ de Catalunya y Aragón ante accidentes en la N-230

La seguridad del tráfico de la N-230 en el Pirineo volvió a ser ayer objeto de críticas. Las reavivó un accidente en el municipio oscense de Areny el pasado miércoles, un siniestro de carácter leve pero que sembró dudas sobre la coordinación entre las autoridades de Catalunya y Aragón en una carretera que transcurre entre las dos comunidades. Una mujer, la única víctima, esperó unos 45 minutos antes de recibir auxilio.

La Guardia Civil recibió aviso a las 14.35 de un vehículo volcado tras salirse de la vía en Areny. Televisió de Catalunya recogió testimonios del siniestro que apuntaban a una espera de más de media hora antes de que llegara la policía y la ambulancia. El parte policial cita solo “daños materiales” y no menciona víctima alguna, si bien los servicios de emergencias aragoneses enviaron una ambulancia y trasladaron a la accidentada a Barbastro. No precisó ser hospitalizada.

Una ambulancia de Aragón trasladó a la accidentada a Barbastro y después llegó otra de Catalunya

Entre tanto, en Catalunya, el SEM recibió aviso del siniestro a las 15.06, por parte de un familiar de la víctima que no estaba en el lugar de los hechos. Una ambulancia del servicio de urgencias catalán acudió a Areny aunque, cuando llegó, la mujer ya había sido trasladada.

El secretario general de Unitat d’Aran (UA) e impulsor de la plataforma para reclamar seguridad en la N-230, Francés Boya, exigió “coordinación” entre Catalunya y Aragón. Por su parte, el vicepresidente de la comarca de la Ribagorza, Marcel Iglesias, corroboró que “se dan casos de falta de coordinación”, como retrasos al atender a accidentados que atribuye a que no siempre es la ambulancia más cercana la que acude al lugar del siniestro. “No pasa a menudo, pero hay que pulir el sistema”, dijo, y avanzó que lo plantearán al Ejecutivo aragonés.

Las administraciones implicadas, por su parte, rechazaron cualquier descoordinación. Algunas fuentes apuntaron que la información que recibieron apuntaba a un siniestro leve en el que no había vidas en peligro.

lleida

El Ateneu Popular Garriguenc y su homólogo en la Conca de Barberà, Conca 22, reiteraron ayer su apuesta por el rescate del peaje de la AP-2 como solución a la siniestralidad en la N-240 y explicaron que, a 1 de enero de 2017, costaría 71 millones compensar a Abertis (la concesión finaliza en 2021), según datos de un estudio que elaboraron en 2012. Ambos colectivos reclaman bonificaciones del peaje a camiones de al menos el 75% y acabar las rotondas de Juneda, mientras que la asociación ecologista Ipcena se posicionó también a favor de liberar el peaje, al considerar que la autopista “ya está en servicio y no afecta ambientalmente”.

Estas entidades se sumaron así a la tesis de Esquerra, para quien la prioridad en la N-240 debe ser el acceso gratuito a la autopista. Una postura que, en el caso del alcalde de Torregrossa, Josep Maria Puig, admite matices: es partidario de liberar el peaje como solución rápida, sin descartar obras en la N-240 en el futuro. ERC se desmarcó el domingo, en la manifestación por la última víctima mortal de accidente en la N-240, de la postura de representantes y electos del PDECat, que apuestan en primera instancia por duplicar la N-240 entre Lleida y Les Borges, entre otras medidas. El conseller Josep Rull reiteró esta defensa el martes. Por otra parte, Josep Ibarz (PDECat), alcalde de Almacelles (también en la N-240) y diputado provincial de servicios técnicos, aseguró que tanto la duplicación como el rescate del peaje están trabajándose y en 5 años pueden ser una realidad. Avanzó que el túnel del Coll de Lilla estará acabado según los planes de Fomento para 2019 Las obras comenzarán este año.