Los Agents Rurals actúan contra una red organizada de furtivos de rebecos en el Pirineo

Efectivos del cuerpo de Agents Rurals interceptaron a un furtivo en el término municipal de Alt Àneu (Pallars Sobirà) el pasado sábado día 12 de noviembre. Los Agents Rurals fueron testigos de como el furtivo, procedente de Madrid y acompañado de un guía local, disparaba y daba muerte a varios rebecos utilizando un rifle de calibre medio con un silenciador acoplado, según ha informado al cuerpo este viernes.

Esta intervención se enmarca en la investigación sobre una posible red organizada de furtivismo de caza mayor que se dedican desde hace tiempo a abatir rebechos ilegalmente en varios lugares del Estado entre los que està la Reserva Nacional de Caza Alt Pallars y algunas Áreas Privadas de Caza de Catalunya. Este operativo de vigilancia especial ha hecho posible la denuncia seis cazadores furtivos en el último año y medio.

La zona donde se produjo la cacería ilegal era dentro de la Reserva Nacional de Caza Alt Pallars (RNCAP) en un lugar de difícil acceso por la orografía del terreno y por la cantidad de nieve que había en el momento de la actuación.

Los agentes levantaron las correspondientes actas de denuncia en materia de caza, reglamento de armas y seguridad ciudadana al cazador furtivo y también denunciaron al guía acompañador y el transportista.

El arma se depositó a la intervención de armas de la Guardia Civil de Tremp, que informó de que el propietario no era el propio furtivo. El arma es de otro cazador de Madrid que también ha sido denunciado por reglamento de armas por ceder un arma de su propiedad sin documento de cesión y sin acompañar a la guía de la misma.

Antecedentes del mismo furtivo en la zona

El denunciado ya contaba dentro de su historial con una denuncia efectuada por los Mossos d'Esquadra el mes de mayo del año pasado dentro del Área Privada de Caza (APC) de Tírvia sin autorización de esta. Aquel día abatió varios rebecos igual que esta vez, utilizando un rifle de calibre medio con un silenciador acoplado, a fin de que los tiros no se pudieran oír a gran distancia. En aquel caso, el infractor hizo efectiva la sanción económica que se le impuso.

En el marco de este operativo especial, los Agents Rurales han denunciado en el último año y medio a seis cazadores furtivos, 3 de ellos de Madrid, con varias denuncias y un total de once rebecos abatidos sin ningún tipo de autorización. Se calcula que los rebecos abatidos ilegalmente en la zona pueden ser muy numerosos dada la periodicidad con que últimamente se ha podido ver que los furtivos reinciden.

Estos cazadores actúan con la colaboración de guías locales conocedores del terreno que les dan apoyo logístico y cobertura ante la posible presencia de efectivos del Cuerpo de Agents Rurals o Mossos d'Esquadra para intentar la huida, ocultar las armas y las capturas realizadas.

Todo parece apuntar que esta persona formaría parte de un grupo de cazadores que se dedican desde hace tiempo a abatir rebecos ilegalmente en varios lugares del Estado.

Las sanciones pueden superar los 30.000 euros

Por las denuncias que se le tramitaron, el denunciado tendrá que hacer frente a sanciones que por las diversas normativas aplicadas pueden superar los 30.000 euros. Una vez pagada la sanción correspondiente, podrá recuperar el material decomisado a excepción de las cabezas de rebeco, que no pueden ser recuperados por haberse abatido ilegalmente y del silenciador para estar prohibida la tenencia y el uso. El arma tampoco se podrá recuperar hasta que se resuelva la propiedad.