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Torrefarrera retoma la gestión
El consistorio se hará cargo del abastecimiento el 1 de enero de 2017 || Tras varios litigios con la firmas que optaban a hacerlo
El ayuntamiento de Torrefarrera gestionará el servicio de agua.
El pleno del ayuntamiento de Torrefarrera aprobó el viernes la reversión definitiva de la gestión directa del agua al consistorio tras 17 años en manos de la empresa Cassa. Dicha reversión se hará efectiva el 1 de enero de 2017 y durante el mes próximo se retornará todo tipo de material, los instrumentos para hacer las lecturas de contadores y el listado de clientes al ayuntamiento, según explicó el alcalde, Jordi Latorre. Además, el consistorio contratará a personal especializado para que se haga cargo de dicho servicio. De esta forma, Torrefarrera se suma a Puigverd de Agramunt, Alfés, Vilagrasa y Bellpuig en la apuesta por remunicipalizar el agua de boca (algunos aún lo debaten). El ayuntamiento ya tomó la decisión de asumir esta prestación a finales de 2015. Hace más de dos años decidió gestionar a través de una firma externa la red de saneamiento y de abastecimiento de forma conjunta. Sin embargo, los problemas entre las dos empresas que pugnaban por este servicio, Aqualia y Cassa (con recursos sucesivos contra la elección de una u otra), hicieron que el Tribunal Català de Contractes excluyera a ambas del concurso y lo dejara desierto, lo que permitió que el consistorio tomara cartas en el asunto al considerar que era un servicio de interés público. En la actualidad, el litigio espera el fallo del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya.
Mientras tanto, el ayuntamiento de Torrefarrera ya se ha hecho cargo de la red de saneamiento para su remodelación dado el problema acuciante que suponen las tuberías de la zona baja de la población que no absorben las aguas fecales y de lluvia cuando hay precipitaciones de importancia, lo que provoca inundaciones en sótanos, garajes y viales públicos que afectan a un centenar de viviendas. Por esta razón, el ayuntamiento adjudicará mañana miércoles el primero de los depósitos de retención de aguas pluviales que se ubicará en la estación de bombeo de la calle Mossèn Cinto Verdaguer, para el que se prevé una inversión que ronda el medio millón de euros.
