sucesos
Desarticulado un grupo de contrabandistas en el Alt Urgell que embistió vehículos policiales
Almacenaban la mercancía en una finca de Ardèvol
La Guardia Civil ha desarticulado un grupo criminal que durante el último mes presuntamente introdujo en Lleida tabaco procedente de Andorra valorado en medio millón de euros en una operación en la que ha detenido a diez personas, entre ellas los máximos responsables del grupo, dos hombres de nacionalidad andorrana que ya están en prisión.
Los jefes del grupo embistieron contra los vehículos de los agentes causando daños y lesiones a algunos guardias civiles en su intento de huida, según un comunicado de la Guardia Civil de este miércoles.
Inicio de la investigación
Agentes de la Seu d'Urgell tuvieron conocimiento de la existencia de varias personas de las comarcas del Alt Urgell y de la Cerdanya, que por el método del "fardo" y a través de una extensa red de colaboradores con distintos cometidos, introducían diariamente por la montaña cantidades de tabaco que almacenaban en una finca de Ardevol, en el término municipal de Prullans.
En la operativa de este grupo, se detectaron hasta un total de ocho vehículos con sus ocupantes y un gran número de personas que, ocultas en el terreno, realizaban funciones de contravigilancia y pilotaje del transporte para evitar ser detectados.
Uno de los responsables, O.H.P., de nacionalidad andorrana y con un largo historial delictivo, utilizaba también este punto de almacenamiento para transportar tabaco a otros destinos de la geografía nacional, empleando vehículos con gran capacidad de carga y cilindrada.
Tras un prolongado período de tiempo dedicado a la investigación, el pasado día 25 la Guardia Civil estableció un operativo que permitió la desarticulación del grupo criminal, del lugar de almacenamiento del tabaco y la detención, entre otros, de uno de los máximos responsables de actividades de contrabando en la zona.
En el dispositivo se han registrado varios domicilios e inmuebles situados en Ardevol y se han incautado un total de 4.262 cajetillas de tabaco rubio de varias marcas, valoradas en 17.775,30 euros, las cantidades diarias máximas que llevaban y acumulaban para evitar ser sorprendidos por la Guardia Civil.
