El macropuente cierra con más esquí y menos ocupación de lo previsto

El Pirineo puso ayer fin al macropuente con una afluencia de esquiadores que ha superado los pronósticos más optimistas y con una ocupación turística algo menor a la esperada. Así, las estaciones leridanas han vendido 88.500 forfaits, lo que supone el tercer mejor registro por estas fechas en los últimos quince años, según datos del Patronato de Turismo de la Diputación. Más de la mitad de esta cifra corresponde a Baqueira Beret, que ha recibido cerca de 45.000 esquiadores desde el pasado 3 de diciembre, según datos de la estación. El resto se reparte entre Boí Taüll, Port Ainé, Espot Esquí y Port del Comte, así como las pistas de esquí nórdico, con cuatro estaciones abiertas (Lles, Aransa, Tuixent-La Vansa y Sant Joan de l’Erm) que recibieron 3.500 esquiadores. También hubo una buena afluencia de esquiadores en Cerler (Huesca) y las pistas de GrandValira y Vallnord, en Andorra. En cuanto a la ocupación, solo los establecimientos a pie de pistas llegaron a rozar el lleno y fue menor en las zonas del Pirineo más alejadas de las estaciones.

La ocupación turística media durante el conjunto del macropuente se sitúa en un 60%, con un promedio del 50% durante el puente de la Constitución y cercano al 70% durante el de la Purísima, según datos del Patronato. El director de este organismo, Juli Alegre, apuntó que estos porcentajes se sitúan “en la parte más baja de las previsiones”, algo que ya había apuntadado el sábado la Federación de Hostelería de Lleida. Pese a ello, señaló que la gran afluencia de esquiadores en un momento en que las estaciones tienen abierto alrededor del 60% de su superficie esquiable y el “buen ritmo” de reservas para la campaña de Navidad y Año Nuevo permiten confiar en una buena temporada de invierno.En Lleida ciudad, la oficina de Turismo ha recibido 1.008 visitantes a lo largo del macropuente, según datos de la Paeria, que indicó que esto supone un incremento del 16,4% respecto al mismo periodo del año pasado.

Colas entre La Seu y Andorra, tráfico intenso en la C-14 y niebla densa El final del puente festivo de la Purísima y del macropuente de la semana pasada se tradujo ayer en retenciones puntuales en carrteras de Lleida. Así, hubo retenciones en la N-145, que comunica La Seu d’Urgell y Andorra, mientras que, por la tarde el tráfico fue intenso en la carretera C-14 entre los municipios de Organyà y Ponts, según datos del Servei Català del Trànsit. Por otra parte, la niebla complicó el tráfico en las carreteras del llano de Lleida. La mayor parte de las incidencias de la ‘operación retorno’ se concentraron en Barcelona.