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Proyecto de FGC para abrir Port Ainé y Espot Esquí a iniciativas privadas

Licita la redacción de un plan de viabilidad para las estaciones de esquí|| El objetivo: incrementar la actividad y los ingresos y saldar el déficit de los complejos

Imagen de Espot Esquí tomada el pasado martes.

Imagen de Espot Esquí tomada el pasado martes.

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Ferrocarrils de la Generalitat ha sacado a concurso por 133.000 euros la elaboración de un plan de viabilidad para cada una de sus estaciones de esquí (en Lleida, Espot y Port Ainé), con el objetivo de ampliar la actividad, incrementar los ingresos y zanjar el déficit. Uno de los mecanismos que servirá a este fin será la apertura de los complejos a iniciativas e inversores privados, de modo que FGC pueda ceder o alquilar alguna parte de los complejos para proyectos lúdicos o deportivos, principalmente. El presidente de FGC, Enric Ticó, explicó en declaraciones a SEGRE que estos planes de viabilidad “aportarán mucha luz” sobre las características y potencialidades de cada complejo. Por ejemplo, Espot tiene una clara vocación de dominio especializado en la alta competición en el deporte blanco. Así, mientras los cinco complejos (Espot, Port Ainé, La Molina, Vall de Núria, todas de su propiedad, y Vallter 2000, en la que FGC es socia mayoritaria) tienen en común ser un polo de atracción para el turismo familiar, los planes de viabilidad de la empresa de la Generalitat definirán también sus diferencias y en qué pueden especializarse cada uno.

Ticó manifestó que en las pistas del Pallars no trabajan aún en un proyecto concreto, pero puso como ejemplo el gran gimnasio de Rialp, a cargo de una empresa particular que utiliza las instalaciones de FGC, como modelo a seguir. Se trata de “ampliar la actividad, pero también detectar nuevas ofertas en clave de negocio. Queremos ofrecer la posibilidad de incrementar los servicios. Tener más ingresos es un objetivo, pero también lo es que cuantos más servicios haya, mejor”, señaló Ticó. Y añadió que todo ello debe contribuir a formar nuevas bases de futuros esquiadores, dado el estancamiento en la cifra de aficionados al deporte blanco en Catalunya desde hace años. También pretenden desestacionalizar la actividad.

El déficit, de 2,8 millones de euros, se ha recortado a la mitadEl de la nieve es un sector muy vulnerable si no está vinculado a la promoción urbanística y las estaciones del Pallars estaban en situación próxima a la quiebra cuando fueron adquiridas por la Generalitat. Se les sumó con los años Boí Taüll, aunque depende de otra empresa pública, Avançsa, y que gestiona Nozar, su antigua propitaria.

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