El inicio de la ola de frío ya ha dejado -19,7 grados en Boí Taüll, el registro más bajo en cinco años
Entre el viernes 13 y el lunes 16 de enero de 2017 se ha acumulado más de un metro de nieve nueva en cotas altas del Pirineo de Lleida y hasta medio metro en algunos valles
El viento del norte y noroeste que los últimos días ha afectado a Catalunya ha provocado una nevada muy importante en todo el Pirineo, que puntualmente saltó al Prepirineo. Concretamente, entre el viernes 13 y el lunes 16 de enero se ha acumulado más de un metro de nieve nueva en las cotas altas del Pirineo leridano, especialmente en su vertiente norte.
En el fondo de algunos valles se ha acumulado hasta más de medio metro, como en algunos sectores de la Val d'Aran y del norte del Pallars Sobirà y la Alta Ribagorça, según datos de la Generalitat.
Cuatro días de nevada
De viernes a lunes, la nevada ha sido prácticamente ininterrumpida en algunos sectores elevados del Pirineo occidental. Se inició la madrugada del viernes y durante la jornada ya se acumularon grosores superiores a los 20 cm en algunos sectores de la Val d'Aran. A lo largo del sábado la precipitación fue más débil, aunque a última hora se empezó a intensificar en la vertiente norte.
El domingo la nieve siguió cayendo en todo el Pirineo, con algunos grosores superiores a los 50 centímetros en 24 horas en la vertiente norte. Por la mañana también se vio nevar en el Prepirineo, dejando grosores inferiores a los 5 cm en puntos del norte del Solsonès o el Alto Berguedà.
La madrugada del lunes la nevada se intensificó, cayendo hasta fondo de valle en toda la vertiente sur, desde la Alta Ribagorça hasta el Ripollès. En cambio, la cota de nieve subió transitoriamente en la Val d'Aran, convirtiendo la nieve en lluvia en las cotas más bajas durante la mañana. A lo largo de la jornada la nevada se fue debilitando en buena parte de la cordillera, aunque el fuerte viento transportaba la nieve y mantenía la mala visibilidad.
Grosores de nieve
La nevada ha afectado exclusivamente a la cordillera pirenaica, así como algunos sectores del Prepirineo. El mapa siguiente, elaborado a partir de los datos facilitados por los colaboradores de la Red de Observadores Meteorológicos (XOM) y registradas por las estaciones de la Red de Estaciones Meteorológicas Automáticas (XEMA) muestra el grosor máximo de nieve nueva medido entre el viernes 13 y el lunes 16 de enero:
En el conjunto de la cordillera ha sido la nevada más importante de la presente temporada, con la excepción de algunos sectores elevados de la vertiente sur y del Prepirineo, donde a finales de noviembre nevó tanto o más.
Rachas de viento superiores a los 100 km/h
Con respecto al viento, a lo largo del temporal ha soplado del norte y del noroeste con fuerza en las cotas altas del Pirineo, Prepirineo y prelitoral, así como a los dos extremos del Principado. El mapa siguiente muestra la racha máxima de viento medida por las estaciones de la XEMA entre el viernes 13 y el martes 17 de enero hasta las 12 del mediodía. Destacan los 153 kilómetros por hora registrados en Boí o los 123 en Espot.
En muchos casos la racha máxima del episodio se ha registrado el martes por la mañana, cuando se ha reforzado el viento de gregal coincidiendo con la llegada de la masa de aire más frío:
La temperatura más baja de los últimos 5 años en la alta montaña
Una vez finalizada la nevada, la llegada de una masa de aire muy frío y más seco ha provocado a uno brusco descenso térmico durante la noche del lunes al martes. Las estaciones de alta montaña de la XEMA situadas a mayor altitud, en torno a los 2.500 m, han registrado valores de temperatura mínima próximos a los -20 ºC. Concretamente, la estación de Boí (2.535 m), en la Alta Ribagorça, ha medido una temperatura mínima de -19,7 ºC.
Se trata de la temperatura más baja registrada por las estaciones de la XEMA desde febrero de 2012, cuando se alcanzaron hasta -23,2 ºC en Certascan (2.400 m), en el Pallars Sobirà.
Predicción para los próximos días
La predicción para el martes indica que dominará el ambiente soleado y que la nevada del Pirineo irá a menos fines a desaparecer del todo. El viento todavía soplará fuerte hasta la noche, especialmente en el Pirineo y en el Empordà, donde el oleaje se mantendrá alterado.
Con respecto a la temperatura, el miércoles y jueves serán dos días de frío riguroso, pero soleados en general. Los valores mínimos de temperatura estarán entre -14 y -9 ºC al Pirineo, entre -10 y -5 ºC en el Prepirineo y a la Depresión Central, entre -7 y -2 ºC en el prelitoral y entre -4 y 1 ºC en el litoral.
Por este motivo el Servei Meteorològic de Catalunya mantiene activados avisos de ola de frío, de viento y de oleaje.
Aparte, entre el jueves y viernes se prevé la llegada de algunas nubes por el litoral y prelitoral y serán posibles algunas precipitaciones débiles, sobre todo en el extremo sur y en el nordeste, con una cota de nieve de unos 600 metros, aunque en el inicio de la precipitación podría ser de unos 400