FERROCARRILES INCIVISMO
Grafitis en la cabina impiden que un tren circule en la línea de Manresa
Las pintadas afectan también a la estación de Cervera y MES-ICV-E pide soluciones || El convoy no pudo salir de la capital de la Segarra por falta de visibilidad
Los edificios, los andenes y el mobiliario de la estación de tren de Cervera están actualmente invadidos por grafittis. En este sentido, el exalcalde del municipio y actual concejal de Més per Cervera-Entesa (MES-ICV-E), Joan Valldaura, pidió al consistorio en el último pleno que llevó a cabo la Paeria que tomara medidas para tratar de solucinar este problema de incivismo, debido al “estado de degradación que presentan las instalaciones de la estación”.
Cabe recordar que el tren denominado “cerverí”, el último convoy que llega de Lleida a las 22.30 horas y se queda estacionado en la capital de la Segarra, en más de una ocasión ha amanecido al día siguiente de su llegada convertido en un lienzo totalmente cubierto de pintadas. Así sucedió el pasado sábado 14 de enero, cuando el primer tren que debía partir desde Cervera en dirección a Lleida, con horario de salida a las 7.35 horas y con llegada a la capital del Segrià a las 8.28 horas, apareció tan lleno de grafitis que no pudo llevar a cabo su trayecto, lo que provocó las quejas de varios usuarios a través de las redes sociales. Según fuentes de Renfe, las pintadas ocuparon la totalidad de los cristales de la cabina del tren, imposibilitando de este modo la visibilidad del maquinista, por lo que la operadora ferroviaria decidió que el vehículo no partiera de la estación por motivos de seguridad y tuvo que habilitar un autobús para poder transportar a los 15 ocupantes del convoy afectado hasta Lleida. Renfe lamentó que “actos de vandalismo e incivismo como estos no solo afectan a los pasajeros, ya que los costes de limpieza los acabamos pagando entre todos”. La entidad pública confirmó que, tan solo en Catalunya, el coste de limpieza por este tipo de incidencias asciende a una media anual de 4 millones de euros aproximadamente y añadió que solventar otros tipos de actos vandálicos no relacionados con los grafitis tienen un coste anual aproximado de 3 millones más. Lo que para algunos es arte urbano y para otros meras actitudes incívicas, los grafittis, están afectando tanto a trenes como a estaciones como la de Cervera, algo que están sufriendo habitualmente los usuarios de estas instalaciones de la capital de la Segarra.