Reñé esquiva su primera derrota en el pleno gracias a Boya, que busca una alianza con CiU

El equipo de gobierno de CiU de la Diputación esquivó ayer su primera derrota en el pleno, en la votación de una moción sobre el reparto de millones de euros en ayudas a municipios. El texto de ERC, PSC, PP, C’s y CUP exigía negociar con la oposición el plan de subvenciones para 2017, hasta ahora en manos del gobierno. La abstención del portavoz de Unitat d’Aran (UA), Francés Boya, permitió que el presidente, Joan Reñé, la rechazara con su voto de calidad tras dos votaciones que acabaron en empate.

Boya reconoció en el pleno que está trabajando en un “acuerdo de gobernabilidad”, algo que daría mayoría absoluta al gobierno de CiU (ahora con 12 de los 25 miembros del pleno provincial). Tras la sesión, añadió que su objetivo es que la Diputación adopte políticas “a favor de las zonas de montaña y del autogobierno de Aran”. Asimismo, puntualizó que el apoyo de UA no significaría formar parte del gobierno. Por su parte, Reñé apuntó solo a “acuerdos puntuales” con la formación aranesa, aunque añadió: “Nunca digo de este agua no beberé”.

Al abstenerse UA, Reñé rechazó la moción con su voto de calidad tras dos votaciones con empate

La moción que unió a todos los grupos en la oposición salvo UA planteaba crear una comisión para negociar el plan de subvenciones. Llegó después de que, en diciembre, ERC presentase otra que exigía limitar las ayudas directas otorgadas por Presidencia y que no llegó a debatirse: los republicanos la retiraron para recabar apoyos entre otros grupos. En las reuniones para preparar el nuevo texto no se convocó a CiU.

Ante estos antecedentes, Reñé valoró que el fin de la moción era reducir su potestad de otorgar ayudas y la calificó como una “moción de censura encubierta” de ERC. Interpeló solo a los republicanos, al considerar que el resto hacía “seguidismo”.

“Déjenme hacer mi trabajo”, espetó a ERC. “Si quieren ser el gobierno, hagan una propuesta para entrar en él”, añadió. El portavoz republicano, Jaume Gilabert, rechazó que esa fuera su intención y arreció en sus críticas a las ayudas de Presidencia, al afirmar que “son el 49% de las que se dan” y que “uno de cada cuatro municipios no recibió ninguna en 2015”. El portavoz de la CUP, Joel Jové, se refirió a la abstención de Boya como “miseria de la política”, aunque lo retiró poco después.

Tras el debate, la votación arrojó un empate de 12 votos en contra de CiU, otros 12 a favor de ERC, PSC, PP, CUP y C’s, y la abstención de UA. Esto obligó a repetirla y, tras repetir resultado, la moción se rechazó por el voto de calidad del presidente.

El grupo socialista expresó su “sorpresa” por la abstención de UA, federado con el PSC, si bien apuntaron que esto no hace peligrar las relaciones entre las dos formaciones. Recordaron la “autonomía” del partido aranés, que no es la primera vez que difiere ensu voto de los socialistas y añadieron que ambas partes han acordado que “no tomarán decisiones definitivas en la Diputación” sin conversaciones previas para coordinarse. El PSC ha apoyado a CiU en cuestiones económicas y de gestión como los presupuestos y el reglamento orgánico (ver claves). En cambio, el gobierno recibe de ERC su principal apoyo a iniciativas soberanistas.

Piden al Govern que evalúe mejorar el sistema antiniebla de AlguaireEl pleno acordó una moción del PP que insta a la Generalitat a estudiar un sistema de aterrizaje instrumental (ILS) de mayores prestaciones en Alguaire, después de que la niebla obligase a desviar a Reus y Barcelona 14 vuelos entre diciembre y enero. Asimismo, reclama “un nuevo plan de negocio” y atraer a más compañías. La portavoz popular, Dolors López, defendió que esta infraestructura “debe aspirar a tener lo mejor”. Los puntos se votaron por separado, ya que la CUP pidió condicionar cualquier inversión al plan de negocio y el estudio sobre el antiniebla. Sobre esto último, Ángeles Ribes (C’s) se declaró “escéptica” y recordó que la Generalitat ha rechazado invertir 7,5 millones en un ILS más avanzado.