El turismo crece un 4% en Lleida en 2016 y el extranjero alcanza una cifra récord

Un total de 784.794 personas se alojaron en hoteles, hostales y pensiones de las comarcas de Lleida en 2016 y generaron 1.722.000 pernoctaciones, lo que supone una media de 2,19 por viajero. Estas cifras suponen un incremento del 4% y del 4,1%, respectivamente, con respecto a 2015, lo que evidencia el tirón que está experimentando el sector turístico de Lleida tras la crisis.

La mayoría de los turistas, 652.000, procedían del resto de Catalunya y del Estado, mientras que casi 133.000 eran extranjeros. El número de estos últimos creció menos, un 2,5%, pero estableció un nuevo récord histórico, superando tanto los 129.623 del año anterior como los 125.440 que se habían alcanzado antes de la crisis. Desde el año 2000, cuando fueron 91.391, el número de visitantes de otros países ha aumentado un 45%. De todas formas, su estancia apenas es algo más larga que la de los nacionales, ya que pasan una media de 2,24 noches en los establecimientos hosteleros, frente a las 2,18 de los segundos.

Estas son algunas de las cifras del informe del observatorio turístico de la Diputación con los datos aportados por la cátedra de Turismo Interior y de Montaña de la corporación provincial y la UdL, que atribuye esta buena evolución “al impacto positivo que la recuperación económica está teniendo sobre la capacidad de gasto en turismo de las familias”. En esta línea, hay que tener en cuenta el peso muy mayoritario del turismo de proximidad, ya que el 59% de los visitantes procedían del resto de Catalunya.

No obstante, y a pesar de que estas cifras invitan al optimismo, el informe indica que el aumento de la ocupación hotelera en las comarcas de Lleida es sensiblemente inferior al registrado en el conjunto de Catalunya (un 8,4%) y España (9,5%). Además, el director de la cátedra, Francisco García, señaló que Lleida solo recibió el 1,1% de los 11.657.000 turistas extranjeros que visitaron Catalunya.

El verano sigue siendo el periodo que concentra buena parte de la actividad del sector. Así, agosto es el mes líder, con un total de 107.977 viajeros alojados en establecimientos de la provincia, seguido por julio, con 90.611. El tercer mes más concurrido, por efecto de las vacaciones de Semana Santa y del último tramo de la temporada de esquí en el Pirineo, fue marzo, con 87.340. El resto de los meses de la campaña de esquí -enero, febrero y diciembre- y el de septiembre se sitúan en un escalón inferior, mientras que los más flojos del año fueron abril (37.320 viajeros) y noviembre (35.176).

Subida por encima de la media en comarcas del llano El informe distribuye a los establecimientos hosteleros en tres zonas: la del llano, la Val d’Aran y el resto de las comarcas del Pirineo. En este sentido, destaca el hecho de que el número de viajeros recibidos por los primeros aumentó en 2016 un 7,8% muy por encima de la media, con un total de 253.525. En cambio, los de la Val d’Aran (218.563)bajaron un 2,9%, lo que atribuye al descenso registrado en diciembre con respecto al mismo mes de 2015. Por su parte, los alojados en establecimientos del resto del Pirineo fueron 312.706, un 6,4% más. Pero a pesar de que el número de viajeros en el llano supera a los del Aran, su estancia es muy breve, ya que solo pasan poco más de una noche de media, lo que hace que la cifra total de pernoctaciones sea poco más de la mitad (378.629 frente a 658.906). Además, en este apartado la Val d’Aran casi iguala al resto del Pirineo (684.717 pernoctaciones), lo que constata que sus turistas pasan más días alojados.