Un 80% de usuarios avala la traída de Rialb que defiende la Generalitat

Veintiuno de los 31 municipios beneficiarios de la traída de agua de boca desde el pantano de Rialb han confirmado por carta a la Generalitat que avalan su propuesta de proyecto y otros 3 prevén aprobarlo en los próximos días, mientras que siete ayuntamientos no han respondido aún a la misiva de la Agència Catalana de l’Aigua sobre este proyecto y presumiblemente no lo harán o lo harán con una negativa. Fuentes de la conselleria de Territorio explicaron que los 24 municipos favorables (a falta del sí oficial de Montornès, Ossó y Els Plans de Sió) equivalen a una población del 81% del total de los beneficiarios (34.881 de los 43.109 vecinos del Urgell, la Segarra, la Conca de Barberà y la Anoia que figuran en el proyecto). Entre los municipios que han avalado la propuesta del conseller Josep Rull se incluyen Tàrrega y Cervera, así como Sant Guim de Freixenet, cuyo ayuntamiento está gobernado por ERC. Es la excepción, porque los siete ayuntamientos que previsiblemente no aceptarán el proyecto son de ERC o Independents per la Segarra (el resto son mayoritariamente del PDeCAT). El peso de los que sí lo aceptan es además de un 85% del consumo total. Fuentes de la conselleria señalaron que el apoyo recabado por el proyecto es fruto de un amplio consenso y, por lo tanto, difícil de obviar. De ahí se deriva que si los siete alcaldes (Estaràs, Guissona, Montoliu, Les Oluges, Sant Guim de la Plana, Torrefeta i Florejacs e Ivorra) mantienen su negativa Territorio no descarta impulsar el proyecto para el resto.

El punto de fricción se centra en que el consell de la Segarra, que gestiona el agua de la comarca, reclama un precio único para todos los usuarios (la propuesta del Govern prevé que sea según el volumen de obra y la impulsión de agua en cada caso) y mayor peso de la comarca en la entidad que dirigirá el servicio. Territorio convocará una nueva reunión en unos días para tratar de llegar a un acuerdo, ya fuera del plazo, que finalizó el viernes. El presidente del consell de la Segarra, Xavier Casoliva, dijo que negociarán hasta alcanzar un acuerdo “que no nos perjudique”. Esta semana tiene previsto reunirse con la alcaldesa de Tàrrega, Rosa Maria Perelló.