Juzgan hoy en Lleida a un hijo de Ruiz-Mateos por una paliza en Aran

Álvaro Ruiz-Mateos, hijo pequeño del conocido empresario José María Ruiz-Mateos (fallecido en 2015), se sentará esta mañana en el banquillo del juzgado de lo Penal número 1 de Lleida acusado de agredir la madrugada del 31 de diciembre de 2012 a dos empleados de un hotel de Baqueira. El benjamín de esta conocida familia aceptará presumiblemente una condena de dos años de cárcel, después de que Fiscalía, defensa y acusación particular hayan llegado a un acuerdo extrajudicial. También se comprometerá a indemnizar a ambas víctimas, representadas por el abogado Enric Rubio.

El altercado entre Ruiz-Mateos, que iba con otras tres personas, y los denunciantes se inició en una discoteca. Al parecer los dos empleados, según el escrito del Ministerio Público, abandonaron el local de ocio nocturno y llamaron a los Mossos d’Esquadra. Posteriormente, se intentaron refugiar en el hotel Montarto, donde trabajan, aunque cuando llegaron no pudieron entrar al ser agredidos en uno de los accesos tras ser perseguidos por el grupo de Ruiz-Mateos. Les propinaron una brutal paliza y tuvieron que ser hospitalizados. Una de las víctimas sufrió lesiones que tardaron casi un año en curar (317 días, de los que 129 fueron impeditivos). Le rompieron dos costillas, le fracturaron un hombro, la órbita izquierda del ojo y le desplazaron el tabique nasal, entre otras lesiones. El otro agredido estuvo casi un mes de baja. La paliza fue captada por las cámaras de seguridad del establecimiento, se conservaron algunas imágenes (ver foto superior) pero la secuencia completa fue borrada por los responsables del hotel.

Una de las víctimas tardó casi un año en recuperarse y la otra estuvo un mes de baja por los golpes

Álvaro Ruiz-Mateos y sus tres acompañantes fueron identificados tras ser interceptados por una patrulla. Iban todos en un coche pero no fueron detenidos al desconocerse la agresión. Antes del acuerdo, Fiscalía pedía que fuera penado con tres años y cuatro meses de cárcel. La acusación lo elevaba a seis.

Les agredieron “con una violencia extrema” Los agentes de los Mossos d’Esquadra que acudieron al lugar pudieron visionar las imágenes de la cámara de seguridad antes de ser borradas y en su atestado señalaron que en estas “se veía de forma clara cómo los acusados agredían de forma desmesurada y con una violencia extrema a los dos jóvenes”. En una de ellas, observaron “de forma clara” cómo Álvaro Ruiz-Mateos lanzaba una bota a una las víctimas.