Un furtivo mata al último buitre negro de Alinyà y acaba con el plan de reintroducción

El plan para reintroducir al buitre negro en la montaña de Alinyà (Alt Urgell) está en peligro después de que el único animal de esta raza que vivía en la zona fuera abatido por un cazador furtivo a finales del año pasado. Se llamaba “Trasgu”, tenía seis años y sobre él recaían muchas de las expectativas de que esta especie criase en la zona prepirenaica de Alinyà. Los Agentes Rurales mantienen abierta una investigación para localizar al autor del disparo. Fuentes del departamento explicaron que están llevando a cabo inspecciones y “controles de cazadores” para dar con el autor del disparo, que se enfrentaría a “una causa penal de un mínimo de dos años de prisión”, dijeron las mismas fuentes. El Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat (Grefa), que participa en el asesoramiento y la ejecución del proyecto, no ha hecho pública la muerte hasta ahora para no entorpecer la investigación que abrieron los Agentes Rurales. La hipótesis de la muerte quedó confirmada tras la necropsia del cadáver del animal en el Centre de Fauna de Vallcalent. El animal fue localizado por técnicos de Grefa y de la Muntanya d’Alinyà (Fundación Catalunya-La Pedrera) que sospecharon que alguna cosa no iba bien cuando el emisor de “Trasgu” indicaba que el ave llevaba mucho tiempo quieta en un mismo punto, a más de 2.000 metros de altura, en Alinyà. Desde Grefa denuncian que “con esta muerte ha acabado con la más firme posibilidad de que el buitre negro se reprodujera por fin en Alinyà”. Y es que aseguran que “Trasgu” era el único ejemplar que se había asentado después de su traslado en 2013, indicó David Manzanera, técnico de la Fundación Catalunya-La Pedrera. En cambio, en la zona de Boumort (Jussà), la colonia de buitre negro no deja de crecer y ya supera las diez parejas, mientras que en Alinyà aún no ha criado y todas las esperanzas estaban puestas en que “Trasgu” lo hiciese próximamente.

Desde 2005 se han liberado un total de 56 ejemplares Desde 2005 se han introducido en Alinyà 28 parejas (56 ejemplares) los cuales han emigrado hacia el sur de Francia, Aragón o la reserva de Boumort (Jussà). El plan para reintroducir buitres negros finalizó en 2016 y los expertos consideran que la zona de Boumort y Alinyà forman un solo corredor dentro de los hábitats del buitre negro. Este ejemplar muerto era el único con posibilidad de cría en la zona de Alinyà.