Más de 30 municipios beberán agua de Rialb en 2019 tras firmar un gran pacto en Cervera

El conseller de Territori Josep Rull, avanzó ayer en Cervera que las obras para la traída de agua de Rialb comenzarán este mismo año y estarán certificadas a finales de 2019. El director del Agència Catalana de l’Aigua, Jordi Agustí, añadió además que en un plazo de 6 meses se habrá formalizado la creación del consorcio de gestión y se habrá aprobado el proyecto. Luego entrará en fase de licitación y su ejecución durará 18 meses. Rull presidió ayer la formalización del acuerdo que permitirá llevar agua del pantano de Rialb (en el río Segre) a 32 municipios de cuatro comarcas. El proyecto se reclama desde hace dos décadas y Rull señaló que “este es un acto histórico, un acuerdo de país y de nación”.

El paraninfo de la Universitat de Cervera acogió la firma de los 32 alcaldes beneficiarios de la traída de Rialb en un acto muy sentido que en algunos momentos, como en la intervención del alcalde de Santa Coloma de Queralt, Magí Trullols, llegó a emocionar cuando este manifestó que “tras 12 años de sufrir falta de agua potable en nuestros municipios, con esta firma conseguimos poner fin a esta vieja y justa reivindicación ya que un pueblo sin agua es un pueblo sin futuro”. Trullols añadió que “éste es el mejor legado que podemos dejar a nuestras futuras generaciones, un pueblo con agua de calidad para siempre”.

El presidente del consell de la Segarra, Xavier Casoliva, aseguró que “tras largas negociaciones hemos conseguido el mejor acuerdo posible, cómodo para todos los pueblos”. El alcalde de Cervera, Ramon Royes, dijo que este acuerdo demuestra que “la política sirve para dar mejor calidad de vida a los vecinos”. Royes comparó el acto de firma del pacto del agua con la cabalgada del agua, una ceremonia simbólica que servía para controlar el agua del río Ondara y que aparece en unos documentos del Arxiu Comarcal de Cervera del siglo XV. Royes entregó a todos los presentes una reproducción del pergamino que muestra una imagen de la cabalgada del agua en la ciudad.

La alcaldesa de Tàrrega, Rosa Maria Perelló, indicó que se trata de un acuerdo vital para el territorio que permitirá garantizar el futuro de nuestros pueblos. Si bien reconoció que “a pesar de que los pueblos implicados en el proyecto partimos de realidades y necesidades muy diferentes, hemos sabido encontrar un punto de confluencia”. El presidente de la Diputación, Joan Reñé, aseguró que el acuerdo “garantizará la disponibilidad de agua potable de calidad a este territorio”.

En cuanto a la oposición al proyecto por parte de la Plataforma en Defensa de l’Ebre, Rull defendió que “este acuerdo no es el inicio de ningún trasvase, de ninguna manera”. Añadió que “estamos hablando de 8 municipios de la Conca de Barberà y de dos de la Anoia”, para los que sí hay aprobado un minitrasvase de algo más de 0,6 hectómetros cúbicos de agua al año desde la cuenca del Segre hacia las internas de Catalunya.