Aragón pide paralizar la traída de Rialb y reabre la polémica sobre el trasvase del Segre

El gobierno de Aragón pidió ayer al ejecutivo central y a la Confederación Hidrográfica del Ebro que paralicen el proyecto de traída de agua de Rialb a través del Segarra-Garrigues a 32 pueblos de la Segarra, el Urgell, la Conca de Barberà y la Anoia al oponerse “frontal y absolutamente” a cualquier trasvase de la cuenca del Ebro (en este caso, su afluente, el Segre) hacia las cuencas internas de Catalunya. El proyecto, cuyo convenio presentó el conseller Josep Rull el 2 de marzo en Cervera, pivota sobre una orden ministerial del 27 de octubre de 2010 por la que el Estado autorizó una transferencia de un máximo de 0,62 hectómetros cúbicos de agua al año para completar el abastecimiento desde Rialb a los municipios cuyo ámbito se sitúa entre las dos cuencas, del Ebro e internas de Catalunya. El trasvase se bendijo solo para los municipios de Forès, Les Piles, Santa Coloma de Queralt y Montmaneu Conca de Barberà, Tarragona, y Anoia, en Barcelona).

En aquel momento, el gobierno de Aragón, que dirigían PSOE Y PAR, aceptó el minitrasvase con condiciones, entre otras, que fuera temporal. La orden ministerial establece que la transferencia de agua a estos municipios, que tienen un déficit crónico de agua potable, caducará cuando reciban recursos hídricos de las cuencas internas. El texto, firmado por la ministra socialista Rosa Aguilar, concluía aplazando la eficacia de la autorización a la puesta en explotación del abastecimiento.

Oliana y Rialb, con 380 hectómetros cúbicos de agua y buenas reservas de nieve en cabecera

Sin embargo, el actual gobierno de Aragón (PSOE y CHA) ha arremetido en los últimos días contra este proyecto, así como contra todos los planes de gestión de la Generalitat, al ver en el fondo un trasvase de agua a Barcelona. Estos planes de gestión, no obstante, no se refieren al proyecto de Rialb, ya que se enmarca en el Ebro. Fuentes de la Generalitat reiteraron que el trasvase fue declarado en su día de interés general. La oposición de Aragón, cuyo presidente, Javier Lambán, pidió ayer comparecer ante las Cortes por esta polémica, se centra en que el actual proyecto dejaría de ser temporal y por sequía y pasaría a “estructural”. Se suma así a la postura de la Plataforma de Defensa del Ebro, que ha entrado en liza de nuevo tras reiterar que el Segarra-Garrigues encubre un trasvase a Barcelona.

El Canal d’Urgell abre la campaña de regadío El Canal d’Urgell inició ayer la campaña de regadío marcada este año por un volumen de reservas de agua en los pantanos por encima de la media de los últimos diez años y por el calor de los últimos días, que ha animado la demanda de agua. Las altas temperaturas favorecen el inicio del deshielo, que será importante dadas las reservas de nieve en el Pirineo, si bien se prevé a partir de hoy una caída de las temperaturas que podría frenar la transformación de las reservas de nieve en agua. El calor, además, ha avanzado la maduración de muchos cultivos, especialmente frutales, y el sector teme por si hay heladas que puedan dañar el proceso. En el Urgell, el presidente de los regantes, Ramon Carné, explicó que entre Oliana y Rialb acumulan 380 hectómetros cúbicos de agua, lo que asegura una temporada de riegos con garantías. La campaña comienza tras una inversión en obras de unos 2 millones, que ha incluido la reforma del túnel de Montclar. El Aragón y Catalunya y el canal de Pinyana ya han comenzado también a regar.