El Síndic pide elementos de protección para los agentes rurales después del doble crimen de Aspa
También reclama endurecer los criterios para poder tener armas, con reconocimientos realizados por profesionales de la Seguridad Social
El homicida, Ismael Rodríguez Clemente, el lunes en la reconstrucción del doble crimen en Aspa.
El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, ha pedido que se dote al cuerpo de Agents Rurals de elementos de protección necesarios para el ejercicio de sus funciones y la formación necesaria para utilizarlos, en la resolución de la actuación de oficio que abrió en enero por la muerte de dos agentes en manos de un cazador en Aspa (Segrià).
Aunque estos agentes tienen una función a menudo coercitiva, que ocasiona "situaciones de riesgo concretas" que se han incrementado en los últimos años, este cuerpo no dispone de una prevención de riesgos laborales adecuada, ha criticado Ribó en un comunicado este martes.
Según dice el documento, el reglamento de los agentes rurales, que "tendría que desplegar todas las cuestiones relativas a las medidas de seguridad y definir las situaciones en que se tendría que determinar la necesidad de llevar armas o no, y también el tipo de armamento, todavía no se ha aprobado, a pesar del tiempo transcurrido y haber sido una reivindicación histórica del Cuerpo. En este sentido, el Síndic recomienda la aprobación con diligencia".
El Síndic recuerda que desde el año 1990 hasta mediados de febrero de 2017 se han recogido y documentado un total de 235 incidentes que corresponden a agresiones, desobediencias y situaciones de violencia en general. Los agentes afirman, sin embargo, que ha habido muchas más.
En cuanto a la descoordinación detectada entre las fuerzas de seguridad implicadas, el Síndic constata que entre el cuerpo de Agents Rurals y los Mossos d'Esquadra no hay un protocolo ante las inspecciones y el control sobre los permisos de armas, aunque sí que hay un protocolo de coordinación y colaboración en la ejecución de las funciones respectivas.
Con relación a esta falta de coordinación, el Síndic propone que en el marco de la próxima Junta de Seguridad se elabore un protocolo concreto y específico en materia de inspecciones y controles sobre permisos de armas que prevea el intercambio de información entre el Ministerio del Interior, el Departamento de Interior y el Departamento de Agricultura, Ganadería y Pesca.
Además, con respecto a la expedición de licencias de armas, recomienda que en el marco de esta misma junta de seguridad se proponga un seguimiento de oficio de las condiciones psicosanitarias de los titulares de los permisos y las licencias de armas que se otorgan para cinco años. De la misma manera, considera que habría que endurecer los criterios para obtener y renovar las licencias. Así, propone que los informes de aptitudes psíquicas y físicas por la obtención de licencias de armas "sólo se puedan expedir en centros autorizados específicamente con esta finalidad y, además, haya que aportar un informe complementario de reconocimiento psicológico efectuado por un psicólogo y/o psiquiatra de la Seguridad Social".
