Una tromba de agua causa desprendimientos en la C-28 y la crecida de ríos

Tormentas breves y muy localizadas, en forma de trombas de agua acompañadas de fuertes vientos a lo largo del día de este jueves, provocaron desprendimientos de rocas que obligaron a dar paso alternativo en la carretera C-28 a su paso por Alt Àneu y favorecieron una fuerte crecida del caudal del Noguera Pallaresa, del Garona y de sus respectivos afluentes. Las precipitaciones cayeron en forma de nieve en cotas altas del Pallars Sobirà, mientras que, en las comarcas del llano, la lluvia estuvo acompañada de granizo en el Segrià, el Pla, el Urgell y Les Garrigues, donde ocasionó daños a la agricultura aún por determinar (más información en la página 22). Los bomberos hicieron un total de siete salidas a lo largo del día por incidencias derivadas del temporal.

Desprendimientos de tierra y rocas en la variante de Els Avets de la C-28 obligaron a dar paso alternativo en dos ocasiones a lo largo del día, por la mañana y por la tarde. Así lo explicaron fuentes del departamento de Territorio y Sostenibilidad, que señalaron que fueron de escasa magnitud y que procedían de un barranco cercano a la calzada. Añadieron que se dan con frecuencia en primavera, durante la época de deshielo.

El viento provocó la caída de un árbol de grandes dimensiones en la plaza Constitució de Lleida, y también cayeron árboles en el núcleo de Raimat. Los bomberos retiraron troncos y ramas en la N-240 en Almacelles y en Gimenells, mientras que drenaron agua acumulada en la calle Calvari de Alguaire.

Las lluvias dejaron 52 litros por metro cuadrado en El Pont de Suert y 32,5 en Sort. Cayeron hasta 24,2 en La Seu, mientras que Lleida registró entre 12 y 19 litros, según datos del Servei Meteorològic de Catalunya.

El caudal del Garona pasó de 1,2 metros cúbicos por segundo a más de 13, mientras que el Noguera Ribagorçana pasó de 17 a 55. El Pallaresa partió de una media de 15 y superó los 26 a su paso por Escaló, según datos de la CHE. El aumento del caudal en este último no impidió los descensos de rafting. Estaba dentro de los límites que la asociación de deportes de aventura del Sobirà considera seguros.